Iolanda Segura (USTEC-STEs): "El cambio era necesario, Cambray tenía a la comunidad educativa en contra"

El pasado lunes 12 de junio el president de la Generalitat, Pere Aragonès, anunciaba cambios en algunas de las conselleries; Educació es una de las áreas afectadas, con la salida de Josep González Cambray, a quien toma el relevo Anna Simó.

Las reacciones a la salida de Cambray de la conselleria no se han hecho esperar, con USTEC-STEs , el principal sindicato de los trabajadores y trabajadoras de la enseñanza de Catalunya, como máximo exponente. En las redes sociales se felicitaron por la decisión y, utilizando la etiqueta #byebyecambray "celebraron" el anuncio.

No es la primera vez que se utiliza este hashtag en Twitter e Instagram para mostrar su oposición con las medidas impulsadas bajo las órdenes de Cambray, aunque parece que ya no será necesario mantenerlo.

El mismo lunes 12, el sindicato emitió un comunicado asegurando que es necesario seguir con las movilizaciones para reclamar una educación pública de calidad y en el que exigía al presidente Aragonés "un cambio de rumbo" en el modelo educativo de Catalunya.

La portavoz del sindicato, Iolanda Segura, explica a CatalunyaPress que "el cambio era necesario" porque "Cambray tenía la comunidad educativa en contra". Además, considera que el ya ex conseller "nunca mostró voluntad de diálogo ni de llegar a consensos" y cree que "solo se puede construir cuando existe esa intención".

Por eso, desde el principal sindicato de la comunidad educativa se muestran esperanzados "que se reconduzca la dinámica" para conseguir tener "una tranquilidad que la educación necesita". Sin embargo, Segura admite que poco más de 48 horas después del anuncio del relevo, todavía no ha habido ningún contacto entre USTEC y los nuevos responsables de la conselleria.

"Se estarán poniendo al día, hay muchos frentes abiertos", valor Segura, que apunta a que las primeras declaraciones de Simó tras asumir el cargo fueron "continuistas", pero considera que "desde un punto de vista político es lo que tocaba". La portavoz de USTEC, pues, asegura estar "a la expectativa" y considera que, aunque Simó "tiene carácter también parece estar más por el diálogo".

"NO FIRMAMOS NADA QUE EMPEJO LAS CONDICIONES"

Con el cambio, pues, toca establecer de nuevo unas dinámicas de negociación. Sea como fuere, Segura se muestra contundente y dice que "no firmaremos nada que empeore las condiciones", en referencia a la última reunión mantenida con el equipo de Cambray a finales del pasado mes.

Entonces, el sindicato dijo que las propuestas que les habían hecho llegar desde la conselleria eran "insuficientes" y volvieron a poner sobre la mesa la posibilidad de hacer huelga, algo que ya ha pasado en las escuelas públicas en este curso escolar 2022-23.

Preguntada por la nota que pondría a este curso que encara sus últimos últimos días, Segura es clara y contundente. "Insuficiente, necesita mejorar", concluye.

¿QUÉ CAMBIOS PIDEN?

El sindicato aprovechó el cambio en la conselleria para poner de nuevo sobre la mesa las reivindicaciones que les han llevado a movilizarse (lo que anuncian que seguirán haciendo).

1) Mejora de las condiciones laborales, que siguen sin acuerdo después de un curso de negociación.

2- Procesos de estabilización: acabar con el maltrato constante al personal interino.

3- Defensa de la escuela pública; actualmente, la inversión es del 2,59% del PIB, lejos del 6% que marca la ley.

4- Impulso de una nueva política educativa.

5- Dar pasos para tener el compromiso público de defensa de la escuela catalana y en catalán.