Trump considera al opositor Juan Guaidó como "presidente" de Venezuela
Guaidó, de 35 años, ha hecho constantes llamadas a las fuerzas armadas ya la población para que se unan y presionen para que se produzca la salida del presidente, Nicolás Maduro, quien el Congreso ha declarado "usurpador".
El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, ha recibido un espaldarazo este miércoles de la mano del presidente de los EEUU, Donald Trump. El dignatario ha considerado a Guaidó como el presidente legítimo de Venezuela y lo ha reconocido oficialmente como la máxima autoridad del país.
Después de Trump, otros dirigentes se han sumado al reconocimiento de Guaidó. En América, países como Canadá, Argentina, Paraguay, Chile, Perú, Costa Rica, Brasil o Colombia, han apoyado al presidente de la Asamblea. Las naciones europeas se han mostrado más prudentes, y solo Donald Tusk ha hecho un tuit deseando que las cancillerías de Europa se sumaran a la oleada de apoyo a Guaidó.
Guaidó se ha autoproclamado presidente de Venezuela la tarde del miércoles 23 de enero, durante una jornada de movilizaciones contra el Gobierno que podría ser el arranque de una oleada de protestas similar a las vividas el 2014 y 2017, que se saldaron con más de ciento muertos y miles de detenidos y la represión de los cuales ha suscitado una investigación preliminar al Tribunal Penal Internacional (TPI).
Guaidó se ha amparado en el artículo 233 de la Constitución de Venezuela, que fija las condiciones en que se considera que el presidente ha dejado de tener autoridad para ejercer su cargo y el poder recae en el presidente del Assamblea Nacional.
EL PAPEL DE LAS FUERZAS ARMADAS
Guaidó, de 35 años, ha hecho constantes llamadas a las fuerzas armadas ya la población para que se unan y presionen para que se produzca la salida del presidente, Nicolás Maduro, quien el Congreso ha declarado "usurpador".
La estrategia que el Parlamento debate desde que Guaidó asumió el cargo hace 17 días es ofrecer garantías legales a funcionarios y militares para que desobedezcan Maduro.
"No pretendo curar las heridas de hace 20 años y no pretendo esconderlas (...); este proceso de curación pasa por este reconocimiento hacia el futuro y que debe haber justicia en su momento por quien lo ha hecho mal", ha aseverado.
La crisis política en Venezuela se ha agudizado desde el pasado 10 de enero, cuando Maduro inició un segundo mandato que la oposición y gran parte de la comunidad internacional no reconocen porque consideran que es fruto de un proceso electoral fraudulento que culminó con la votación del 20 de mayo.
La oposición ha convocado para el 23 de enero una jornada de movilizaciones contra el Gobierno que podría ser el arranque de una ola de protestas similar a las vividas en 2014 y 2017, que se saldaron con más de cien muertos y miles de detenidos y la represión de los que ha suscitado una investigación preliminar en el Tribunal Penal Internacional (TPI).
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