Trapero abandona en su declaración a los independentistas para salvar a los Mossos

 

José Luis Trapero ha dado la sorpresa, sobre todo a los independentistas. El mayor y ex responsable operativo de los Mossos, era seguramente el testigo más esperado del juicio del 1-O. Trapero compareció este pasado jueves ante el Tribunal Supremo a petición de la Fiscalía, para cerrar el turno de declaraciones de ex altos cargos de los Mossos.

El mayor del cuerpo de policía catalán ha cambiado de estrategia y ha señalado directamente a Puigdemont, Forn y la Generalitat como responsables por el 1-O para defenderse de la acusación de sedición. Y eso, ha alterado y mucho el guión de los independentistas.

Trapero ha cambiado su discurso, muy consciente de lo que eso supondría para el independentismo catalán. Él es una de las figuras idolatradas por parte de los partidos que quieren la República Catalana por l aactuación de los Mossos el 1-O, que no utilizaron las cargas policías y facilitaron en algunos casos el traslado de urnas para votar a los colegios.

Pero a él no le importa alejarse del independentismo con tal de mantenerse fiel a las instituciones que tenían autoridad sobre los Mossos. Su estrategia se ha basado en salvar la imagen del cuerpo catalán, cuyo resto de miembros no están imputados como él en la causa pero sí han comparecido también en el Supremo como testigos.

Trapero no quiere generalizar y que el cuerpo pague la actuación divida que se produjo durante el referéndum ilegal de octubre de 2017. Así que, su idea dar a entender a la opinión pública con sus declaraciones que los Mossos fueron “víctimas colaterales” de las decisiones políticas que tomaron Puigdemont y su Govern.

Por ello, Trapero ha afirmado que la actuación de los Mossos el 1-O fue “intachable” y que se limitaron a seguir órdenes, para no dar cabida a ningún tipo de reproche legal. Incluso el mayor apunta que estas órdenes fueron cuestionadas por el propio cuerpo y, que, aún así, Puigemont quiso seguir con el referéndum ilegal.

Evitar el delito de sedición

La Audiencia Nacional acusa a Trapero por delito de sedición por no haber actuado correctamente. Se le acusa de omitir su acción hacia la dispersión de los manifestantes y facilitar la salida del edificio a las personas que trabajaban allí el 20 de septiembre de 2017 durante el registro judicial en el Departamento de Economía, rodeado por una muchedumbre de Omnium Cultural y la ANC con sus líderes, los Jordis, intentando impedirlo.

Evitar este delito, es otro de los motivos por los que Trapero se ha saltado el guión, que incluso ha sorprendido a su propia abogada, Olga Tubau. Ante la negación del Supremo a Tubau para hacer un alegato antes de la declaración de Trapero y así marcar la línea a seguir en la declaración, el mayor tomó las riendas de su propio discurso.