La Cambra de Barcelona empieza su campaña proindependencia con un informe de hace siete años

 

La candidatura independentista ‘Eines de País’, que ganó las elecciones de la Cambra de Comerç de Barcelona, empieza su mandato prometiendo informes que buscan justificar y endulzar una hipotética independencia de Catalunya.

Pero mientras estos no estén hechos, qué mejor aperitivo que desempolvando uno que estaba en el fondo de un cajón. Se trata de un informe elaborado en noviembre de 2012 y que el equipo configurado dentro de la ANC y que ahora ha tomado el control de la Cambra saca a la luz para ir calentando motores.

Dicho informe, ‘Les conseqüències econòmiques d’un Estat propi a Catalunya’, elaborado por el Gabinete de Estudios Económicos de esta institución, nunca llegó a ser publicado. 

Pero según el nuevo presidente de la Cambra de Barcelona, Joan Canadell, eso no importa; continúa estando vigente y "ayuda a reflexionar" sobre los efectos que podría tener la independencia de Catalunya para la economía.

El estudio –que sirvió de base para dos estudios posteriores que se presentaron en 2014- plantea diferentes hipótesis posibles, señalando que la independencia implica riesgos económicos "significativos" a corto plazo, sobre todo los relacionados con un aumento de la inseguridad jurídica. Pero agrega que es una oportunidad para realizar políticas públicas mejor financiadas.

De todas maneras hay un detalle importante, y es que este informe (y los otros dos) da por hecho que Catalunya seguiría dentro del marco de las instituciones europeas.

SIEMPRE DENTRO DE LA UE

Y es que aunque la mayoría de independentistas preferirían quedarse en la UE, esta posibilidad es de todo punto inverosímil. Todos los líderes de la UE han advertido reiteradamente que si Catalunya se independiza quedará excluida de la UE y los Tratados dejarían de aplicarse desde ese mismo instante.

De esta manera, este primer informe pasa por alto las consecuencias que tendría para la economía catalana la salida de la Unión Europea. Por ejemplo, la pérdida del Producto Interior Bruto (PIB). Un informe de la entidad bancaria Credit Suisse cifraba la pérdida en un 20%. España se quedaría sin los 200.000 millones del PIB catalán.

Una Catalunya fuera de la UE vería mermada su competitividad y sus exportaciones se encarecerían porque el euro sería una moneda extrajera. La salida de la UE conllevaría tener que pagar un sobrecoste debido a los aranceles para comercio y exportaciones.

También se quedaría fuera del Banco Central Europeo (BCE) y de la Unión Bancaria. Así, lo que quedara del sistema bancario catalán no tendría garantizada la liquidez que le otorga el de la UE y no tendría acceso a sus líneas de crédito en caso de un escenario difícil.

Un hipotético estado catalán fuera del marco europeo dejaría de acceder a los Fondos Estructurales y de Inversión de la UE. La asignación para Catalunya entre los años 2014 y 2020 es de más de 1.400 millones de euros. También se quedaría fuera del Mecanismo Europeo de Estabilidad, con capacidad de hasta 500.000 millones de euros de crédito para evitar quiebras.

Otra de las consecuencias es que se dispararía la prima de riesgo por encima incluso de los 650 puntos, cifra que alcanzó en 2012.

Además, quedaría en el aire cómo haría frente desde el primer día un estado catalán independiente a todas las partidas presupuestarias que ante estaban garantizadas por el Estado, como por ejemplo las pensiones, entre otras muchas cuestiones.

Demasiadas incertidumbres que este estudio pasa por alto. No en vano, la Cambra de Barcelona advierte de que “en este documento se evita tratar la cuestión de la soberanía como hipótesis que pueda ser validada o rechazada como resultado de un análisis coste-beneficio”.

Sea como fuere, “el estudio concluye que el proyecto de una Catalunya con Estado propio dentro de la Unión Europea implica riesgos económico significativos a corto plazo”, reconoce la Cambra de Barcelona. 

Y señala además que “el Estado propio no representa unos beneficios asegurados a los que se pueden contraponer unos costes inevitables”.

Una vez más, la independencia de Catalunya sería más bien un auto de fe.

Primer comité ejecutivo de la Cambra de Barcelona con Joan Canadell al frente de la entidad

DOS NUEVOS ESTUDIOS

La Cambra de Barcelona prevé presentar a finales de julio un estudio sobre las inversiones extranjeras en Catalunya, al considerar que los datos que publica el Estado sobre esta cuestión "no representan la realidad".

Canadell ha explicado que en los informes que publica el Gobierno se recoge "todo lo que se puede considerar como inversión", pese a que ha valorado que algunas de estas acciones no puedan suponer inversiones productivas.

Ha dicho que el informe que elaborará la Cambra se parecerá a los que regularmente elabora Acció y que se deberían hacer en el resto de comunidades autónomas para poder compararlas entre ellas, por lo que se ha dirigido al presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, y le ha animado a fomentarlo.

MÁS: Canadell se plantea dejar de responder en castellano a la prensa

El segundo estudio que publicará la entidad, que está previsto para octubre, será uno que cuantifique los costes de oportunidad de las inversiones que no ejecuta el Estado en Catalunya para los empresarios y la sociedad, y ha criticado los "3.800 millones de euros que aún no han llegado" y que contempla la disposición adicional tercera del Estatut.

Asimismo, Canadell ha informado de que el comité ejecutivo ha aprobado la contratación de dos técnicos en el área de Estudios de la Cambra  de Barcelona; la elaboración de un informe sobre los estados contables de la corporación al finalizar el anterior mandato, y revisarán si tiran adelante el acuerdo de trasladar su sede al nuevo edificio en el 22@.

NUEVA LEY DE CÁMARAS CATALANAS

Canadell ha explicado que la futura ley de Cámaras Catalanas parte de un borrador de 2015 que "no convence" al nuevo equipo directivo de la corporación barcelonesa, y que harán una propuesta nueva y se la presentarán a la consellera de Empresa de la Generalitat, Àngels Chacón.

Ha argumentado que el borrador da un "exceso de protagonismo" a una futura Cambra de Catalunya, lo que ha señalado que sería similar a lo que ocurre con la Cámara de Comercio de España.

Ha remarcado que este planteamiento no les interesa porque las diferentes cámaras catalanas tienen que representar al territorio y que "quien está más cerca" de las empresas es quién lo puede hacer mejor, pese que no ha querido rechazar la constitución de una Cambra de Catalunya y ha criticado cómo se está planteando.