​El Hermitage recurre la decisión del Ayuntamiento de no dejarle instalarse en la bocana del Puerto

 

Los impulsores de la construcción del Museo Hermitage en la bocana del puerto de Barcelona han presentado una serie de alegaciones a la decisión del equipo de Gobierno municipal que preside Ada Colau de rechazar su proyecto.

Además, consideran que la postura de los regidores del Barcelona en Comú están basando sus decisiones, en este caso, en cuestiones ideológicas, ya que estas van en contra de la potestad de Puerto y el derecho del solicitante de la concesión.

Entre las alegaciones destacan el hecho de que el proyecto cumple con todos los requisitos legales, administrativos y urbanísticos de la ciudad. Además, recuerdan que en la Tercera Modificación del Plan Especial de la Nova Bocana, aprobada el 27 de abril de 2018 con el voto favorable de BComú, ya está prevista la instalación del museo en dicho emplazamiento.

A juicio de los impulsores del proyecto, de no ser este aceptado se producirá una actuación nula de pleno derecho que carece de fundamento jurídico, y que supondría una violación del Derecho de la UE en cuanto a la libre prestación de servicios y establecimiento.

Los impulsores del proyecto se han reunido en varias ocasiones con representantes de todos los partidos políticos, excepto BeC que se ha negado a recibirles, que están representados en el pleno municipal.

Y cuentan con el apoyo de las asociaciones vecinales de la Barceloneta, que consideran que el museo será un centro de atracción para los turistas, algo que repercutirá de manera muy positiva en la economía del barrio.

También la Cámara de Barcelona mostró hace unas semanas su apoyo a la construcción del museo al considerar que fortalecerá su posición cultural y dinamizará la economía de la capital catalana, que la entidad cameral considera una referencia cultural internacional gracias a la colaboración público privada.