Daniel Osàcar niega las acusaciones a CDC: "Aquí se ha mentido mucho"
"Las afirmaciones que se han hecho sobre mi persona son falsas", y ha añadido que las visitas qué él hacía al Palau de la Música eran exclusivamente en base al convenio que la Fundació Trias Fargas.
El extesorero de CDC acusado en el caso Palau, Daniel Osàcar, ha negado este jueves en juicio las acusaciones del expresidente de la institución, Fèlix Millet y de su mano derecha, Jordi Montull, de que el partido cobró comisiones ilegales de Ferrovial a través de la entidad: "Aquí se ha mentido mucho".
"Las afirmaciones que se han hecho sobre mi persona son falsas", y ha añadido que las visitas qué él hacía al Palau de la Música eran exclusivamente en base al convenio que la Fundació Trias Fargas --de la que era presidente-- tenía con esta institución cultural.
Este mismo jueves, Jordi Montull ha dado una versión contraria y ha señalado a Osàcar, en la misma línea que el jueves habían hecho Millet y su hija Gemma Montull: "Él venía, yo tenía el dinero a punto en un sobre, él lo contaba, lo cogía y se iba".
Osàcar ha sugerido que todo el dinero que se expolió del Palau de la Música se lo quedaron los acusados Fèlix Millet y Jordi Montull, al responder una pregunta directa del fiscal sobre eso: "Me lo imagino. Yo no lo sé, pero tengo la impresión de que todo va por aquí".
Ha explicado que la relación con el Palau de la Música se circunscribía únicamente al convenio cultural con la Fundació Trias Fargas, de la órbita de CDC, cuyo objetivo era difundir la cultura catalana, un objetivo compartido entre el partido y el Orfeó.
QUE NO PUSIERAN SÓLO MÚSICA ANDALUZA
Así, la idea era que CDC -que en ese momento estaba al frente de unos 600 ayuntamientos- trabajara para que no se olvidara la cultura catalana a nivel local y que, por ejemplo, tratara de que en las fiestas populares "no pusieran solo música andaluza; que no olvidaran las sardanas y la coral".
Ha explicado que la acción de promover la cultura catalana no solo la asumían desde la Fundació Trias Fargas, ya que eran pocas personas, sino que se trataba de influir en los cargos locales para promover la cultura catalana, y de que estos convenios con el Palau se comunicaban a la Sindicatura de Cuentas, y se declaraban a Hacienda y al Tribunal de Cuentas.
Ha tachado de totalmente falso que se cobraran en efectivo los convenios: "Es ilegal recibir dinero en efectivo; hay que recibirlo en cheque nominativo. Y tampoco es correcto un ingreso en una cuenta".
Al preguntársele si esos convenios eran para vehicular comisiones para obra pública, Osàcar ha zanjado: "Escuche, no sé nada, ni media palabra".
"Estos señores de Ferrovial --dos cargos de esta empresa están acusados por recibir obra pública a cambio de donaciones al partido-- los he conocido aquí. No les conocía de nada, no he tenido ninguna conversación o encuentro, es totalmente falso".
"NO ME LO CREO, MIRE"
Osàcar ha insistido, a preguntas del fiscal, en que estas acusaciones no son ciertas, a lo que el fiscal le ha respondido: "No me lo creo, mire".
El extesorero ha asegurado que CDC ha pagado todas las facturas por servicios realizados al partido y ha rechazado que algunas las abonara el Palau: "Esto está fiscalizado y comprobado".
Ha recordado que la consellera de Justicia de la Generalitat al registrarse el Palau (2009), Montserrat Tura (PSC), "dijo que estos convenios eran totalmente legales".
Ha ratificado que los convenios anuales con el Palau se abonaban entre 60.0000 y 120.000 euros según el año, y que al cabo de los años sumaron unos 600.000 euros, y ha recordado que cuando saltó el escándalo devolvieron el dinero para resarcir al Palau.
Osàcar --que ha acudido al juicio únicamente acompañado de sus abogados, mientras que durante la instrucción fue arropado por cargos del partido-- fue nombrado tesorero de CDC en 2005 al morir Carles Torrent, y a petición de Germà Gordó, y ha destacado que nunca tuvo ningún cargo público porque su único objetivo era "el bien del país".
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