El plan de Collboni para tentar a ERC y neutralizar a los Comuns

El gobierno municipal de Jaume Collboni ha iniciado 2025 con una estrategia política marcada por la presentación de su propuesta de presupuestos, con la que busca atraer a Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y aislar a Barcelona en Comú (BComú) en el debate presupuestario. Con un total de 3.854 millones de euros, que representan un aumento del 1,2% respecto al año anterior, los presupuestos destacan por un récord histórico en inversión en vivienda y la reanudación de las obras del tranvía, dos medidas clave con las que Collboni intenta ganar el respaldo de ERC mientras deja de lado las demandas emblemáticas de los Comuns.

Las prioridades del presupuesto: vivienda y tranvía

El gran atractivo del plan presupuestario socialista radica en el aumento de la partida destinada a vivienda, que alcanza los 200 millones de euros, un incremento significativo respecto a los 153 millones del año pasado. Además, los presupuestos incluyen 114 millones de euros para avanzar en la conexión del tranvía, concretamente en el tramo entre Verdaguer y el Passeig de Gràcia, aunque la fase final hasta Francesc Macià queda pendiente.

Estas medidas buscan alinearse con las prioridades históricas de ERC, que ha manifestado su interés en temas relacionados con el transporte público y la vivienda, aunque hasta el momento no hay confirmación de que la formación republicana apoye el proyecto.

El pulso con los Comuns

La propuesta de Collboni deja fuera de los presupuestos las principales reivindicaciones de Barcelona en Comú, liderados por Janet Sanz, como los ejes verdes, la creación de una funeraria pública, la óptica municipal y el año gratuito del servicio de Bicing para jóvenes. Esta omisión ha generado incomodidad en BComú, que acusa al alcalde socialista de "renunciar a tener unos presupuestos" y de ignorar iniciativas clave para avanzar en sostenibilidad y justicia social.

Collboni parece dispuesto a jugar al desgaste con los Comuns, presionándolos a tomar una decisión sobre los presupuestos mientras apunta a su predisposición para negociar con ERC. Esta estrategia busca dividir a las fuerzas de izquierda y consolidar un frente más pragmático que respalde su liderazgo.

Junts y la falta de consenso general

Por otro lado, Junts per Catalunya, liderados por Jordi Martí Galbis, también ha criticado la propuesta socialista. Consideran que el aumento presupuestario no supera la inflación, lo que, según ellos, limita la capacidad expansiva de las cuentas. Además, han lamentado que no se les haya incluido en el proceso de negociación.

Un futuro incierto para los presupuestos

A día de hoy, el gobierno de Collboni no ha garantizado si someterá los presupuestos a votación en la comisión municipal. En caso de no alcanzar acuerdos, es probable que opte por prorrogar los números de 2024, lo que evidenciaría una incapacidad para alcanzar consensos en un consistorio fragmentado.