La extraña alianza entre Junts, PP y Comuns para debilitar a Collboni

Junts, Barcelona en Comú y el PP se unen para reprobar al alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en un contexto de creciente incertidumbre política

|
EuropaPress 6489303 i d segunda teniente alcaldia maria eugenia gay alcalde barcelona jaume
La segunda teniente de alcaldía, Maria Eugènia Gay, y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni - EP

 

El pleno municipal de l'Ajuntament de Barcelona de este enero ha marcado un hito en la política local, con una sorprendente y poco habitual coalición entre Junts per Barcelona, Barcelona en Comú y el Partit Popular. Esta alianza, que ha dado lugar a la tercera reprobación del alcalde Jaume Collboni durante su mandato, ha puesto de manifiesto la debilidad de su gobierno y la creciente oposición que enfrenta en el consistorio.

La moción de reprobación presentada por Junts per Barcelona acusa a Collboni de "incapacidad" para gestionar la ciudad, señalando la falta de acuerdos con otros grupos municipales y la situación de "minoría" en la que se encuentra su gobierno. De acuerdo con los promotores de la propuesta, la incapacidad del alcalde para obtener el consenso necesario ha dejado a Barcelona sin un presupuesto aprobado para 2025, lo que, según ellos, perjudica gravemente a la ciudad y sus vecinos. La moción insta al gobierno municipal a hacer un "cambio urgente" en su forma de gobernar, promoviendo un modelo basado en el diálogo, el acuerdo y el consenso.

Jordi Martí Galbis, presidente del grupo municipal de Junts, fue muy crítico con la gestión de Collboni, subrayando que el alcalde lidera el "gobierno más débil de toda la democracia" al contar solo con 10 concejales de los 41 del consistorio. Martí Galbis también recordó que bajo la administración Collboni no existen acuerdos de presupuesto, planes de actuación distrital o inversiones municipales concretas.

En respuesta, Laia Bonet, tinenta d’alcaldia del gobierno municipal, defendió el trabajo del equipo de Collboni, argumentando que el gobierno ha avanzado en la ciudad a través de acuerdos con los grupos de la oposición. No obstante, también aprovechó para criticar el papel de Junts en el Congreso de los Diputados, especialmente respecto al decreto ómnibus, y le reprochó su actitud en este contexto.

Aunque los enfrentamientos fueron evidentes, la moción de reprobación fue finalmente aprobada gracias al apoyo de Junts, Barcelona en Comú y el PP, en una votación que dejó clara la división en el consistorio. Por su parte, ERC optó por abstenerse en la votación, mientras que Vox fue el único grupo que apoyó al PSC.

Este episodio refleja una creciente polarización en el Ayuntamiento de Barcelona y subraya la fragilidad del gobierno de Collboni, que se encuentra cada vez más aislado y sin capacidad para cerrar acuerdos con las principales formaciones de la ciudad. La extraña alianza entre Junts, el PP y Barcelona en Comú pone en evidencia las tensiones internas y la dificultad de Collboni para mantener el control en un momento clave de su mandato. A medida que se acerca el ecuador de su gobierno, la situación política en Barcelona se perfila como incierta, y las próximas decisiones serán determinantes para el futuro de su administración.

Sin comentarios

Escribe tu comentario




He leído y acepto la política de privacidad

No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
AHORA EN LA PORTADA
ECONOMÍA