Nueva polémica: expulsan a Aída Nízar del plató de 'Ni que fuéramos'

Esta tarde, Aída Nízar ha sido expulsada del plató de Ni que fuéramos, el programa conducido por María Patiño, debido a que su camiseta se transparentaba, lo que ha desatado una discusión en directo sobre la censura y la desigualdad de género en televisión.

Aída Nízar enfrenta la censura en pleno directo

Todo ha comenzado cuando María Patiño ha interrumpido el curso habitual del programa para dirigirse a Nízar. "Tenemos un problema que no tiene nada que ver con el tema de hoy", ha explicado Patiño. El motivo: la camiseta de Aída se transparentaba, y las normativas de YouTube no consideraban apropiado que se mostrara en cámara.

"Aída, tienes que abandonar el plató porque, en el plano corto, se te transparenta una parte de tu anatomía que a mí me parece maravillosa, pero YouTube no lo considera adecuado", ha señalado la presentadora.

La reacción de Aída Nízar: denuncia una doble moral

Indignada por la situación, Aída Nízar no ha tardado en cuestionar la decisión, argumentando lo que considera una injusticia. "¿Por qué tú puedes llevar escote y yo no?", ha replicado, señalando lo que considera una doble moral en las reglas de vestimenta.

Nízar también ha comparado su situación con la de su compañero Javi de Hoyos: "Si Javi viene sin camiseta, no pasa nada, pero a mí me echan por ser mujer", ha comentado, visiblemente frustrada.

María Patiño apoya a Aída Nízar, pero culpa a las redes sociales

María Patiño, pese a intentar mantener la calma, ha mostrado su apoyo a la reflexión de Nízar, pero ha explicado que la decisión ha sido impuesta por las normativas de las plataformas como YouTube, que aplican restricciones estrictas sobre la exposición de ciertas partes del cuerpo, especialmente en mujeres.

Reacciones en redes sociales: debate sobre la censura y el trato a las mujeres

El incidente ha generado una ola de comentarios en redes sociales. Algunos usuarios han aplaudido a Aída Nízar por denunciar la desigualdad de trato hacia las mujeres en televisión, mientras que otros han defendido la decisión del programa, asegurando que se trataba de una medida necesaria para cumplir con las normativas de las plataformas de streaming.

Este episodio de Ni que fuéramos ha vuelto a poner a Aída Nízar en el centro del debate mediático, transformando lo que podría haber sido un simple contratiempo en una reflexión sobre la censura y la igualdad de género en los medios de comunicación.