“La tortuga búlgara” edita dos poemarios de autores eslavos
Se trata de “Póster estilo punk rock sin enmarcar” del letón Serguei Timoféev y “Procesión” del búlgaro Kiril Vasilev
Si arriesgado es el trabajo de cualquier editor, de heroico cabe adjetivar el de aquel que se atreve a publicar obra poética. Y si añadimos además que ésta procede de países europeos que han estado vinculados a Rusia, cuyos autores manejan con soltura dicha lengua y nos resultan poco o nada conocidos por estos pagos, el empeño todavía resulta más meritorio. Nada de ello ha arredrado a los promotores de un nuevo sello denominado “La Tortuga Búlgara” que debutan con sendos volúmenes dedicados a un autor letón y otro búlgaro.
Letón es Serguei Timoféev que se expresa literariamente en ruso y es miembro del grupo de poetas y artistas visuales Orbita. Antonio Sánchez Carnicero, cotraductor con Marco Vidal de “Póster estilo punk rock sin enmarcar”, dice que “esta antología de poemas presenta una amalgama de imágenes mundanas con profundas reflexiones filosóficas. A través de un lenguaje directo, a menudo narrativo y con exhortaciones directas al lector, el poeta invita a observar la belleza en lo banal, crea una atmósfera envolvente que conecta con lo familiar y desconcierta a partes iguales. Los temas más recurrentes son el paso del tiempo, las relaciones humanas y la búsqueda de sentido en lo efímero, y encuentran expresión en una simbología entre surrealista y concreta. El tono, a veces melancólico, a veces lúdico, rebela a un Timoféev que intenta abrirnos puertas hacia nuevas realidades, universos paralelos a lo cotidiano o desdoblamientos orgánicos de una misma realidad. ¿Con qué objetivo? Pues no otro que darle sentido a la temporalidad indisociable de la vida del individuo y trascender la inefabilidad de lo cotidiano”.
También ha sido Marco Vidal quien ha traducido “Procesión” del búlgaro Kiril Vasilev. Nacido en 1971, Vasilev es doctor en Teoría e Historia de la Cultura, ha trabajado como maestro, periodista, librero y conservador de museo y es autor de los poemarios Tres poemas (2004), Las hojas ausentes (2010), Provincias (2015) y La marcha y de traducciones y textos de crítica literaria publicados en diversas revistas. Ha dirigido además una columna sobre arte en el periódico “Кultura”. Dice el editor que “el cuerpo enfermo aparece como extensión de los social y la historia. Bulgaria: del Imperio Otomano al autoritarismo, luego el estalinismo hasta el presente tajo del trauma neoliberal. Todo un compendio de desesperación callada, de resistir amargo en un desaliento cotidiano. Tanto dolor vertido por el mundo se arrastra en cada uno de estos versos: «solo piedras sacian la sed»”.
Un dato a añadir a estas cuidadas antologías: ambas son ediciones bilingües, pero una es ruso-español y la otra búlgaro-español.
Escribe tu comentario