El director de Gladiator II revela por qué decidió hacer la secuela
El aclamado filme original, estrenado en 2000, ganó cinco Oscars, incluido el de Mejor Película, y dejó una marca indeleble en los corazones de los espectadores
El director Ridley Scott ha revelado los motivos detrás de su decisión de hacer una secuela de Gladiator, una película que ha perdurado en el tiempo gracias a su impacto emocional y su resonancia cultural. El aclamado filme original, estrenado en 2000, ganó cinco Oscars, incluido el de Mejor Película, y dejó una marca indeleble en los corazones de los espectadores. Sin embargo, la secuela, Gladiator II, llega más de 20 años después de su antecesora, lo que generó expectativas y desafíos considerables.
Scott reflexionó sobre las decisiones tomadas en la película original, señalando: "Uno siempre se pregunta: ‘¿Realmente deberíamos matarlos o no?’", refiriéndose al destino de los personajes y al legado que dejó la historia. El director también recordó la perdurabilidad de la película, mencionando cómo constantemente escuchaba a personas decir que Gladiator era su filme favorito, algo que le hizo pensar profundamente. “Un hombre me dijo: ‘La he visto 50 veces’. Eso me hizo pensar”, agregó Scott, indicando cómo la conexión emocional con el público fue uno de los factores que lo impulsó a considerar una secuela. Estas declaraciones fueron ofrecidas en una entrevista para The Hollywood Reporter.
La trama de Gladiator II se sitúa dos décadas después de los eventos de la primera película, con el personaje de Lucius, hijo de Lucilla y sobrino de Commodus, interpretado por Paul Mescal. Lucius es capturado y esclavizado por el general Acacius, un villano interpretado por Pedro Pascal. La secuela aborda temas de venganza, redención y el poder, mientras el protagonista lucha por superar la opresión y encontrar su propósito. La producción de la película, sin embargo, no fue fácil.
Durante el rodaje, los equipos enfrentaron calor extremo, accidentes y un presupuesto que superó los 300 millones de dólares debido a interrupciones por huelgas. Scott, sin embargo, mantuvo la producción en marcha, logrando completar la filmación en 50 días con el uso de múltiples cámaras para capturar las escenas más complejas. En una de las situaciones más complicadas, el director recordó: “Fue muy desafortunado, pero logramos salir adelante”, haciendo referencia a los accidentes en el set, como quemaduras durante una escena de fuego.
La elección de Paul Mescal para interpretar a Lucius fue un punto clave en el desarrollo de la película. Doug Wick, productor de Gladiator II, expresó: “Nadie se acercó a lo que él podía ofrecer”. Mescal, por su parte, describió la experiencia de filmar la película como un desafío físico extremo. “Probablemente hubo episodios cercanos a un golpe de calor; no se puede ingerir suficiente agua bajo ese calor”, dijo el actor sobre las difíciles condiciones de rodaje. Sin embargo, a pesar de las dificultades, destacó que lo que hacía especial a la película era su conexión con las emociones humanas.
Otro de los personajes importantes de la secuela es Macrinus, el mentor de Lucius, interpretado por Denzel Washington. El actor, quien se mostró entusiasta con la oportunidad de trabajar con Scott, comentó: “Ridley es uno de los mejores. Cuando me llamó, solo tuve que preguntar: ‘¿Cuándo empezamos?’”. La película también cuenta con un elenco destacado, incluyendo a Connie Nielsen, quien regresa como Lucilla, y Fred Hechinger, quien interpreta a Caracalla. La magnitud de los escenarios, algunos de los cuales fueron filmados en Malta, impresionó al director de fotografía, John Mathieson, quien señaló que la grandeza de los sets era “tan impresionante como intimidante”. Entre los desafíos adicionales que enfrentó el rodaje, Fred Hechinger relató un incidente con un mono que atacó a un actor, provocando una mordedura menor.
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