Rory Callum Sykes, exestrella infantil de cine, figura entre las víctimas mortales de los incendios forestales que afectan a Los Angeles desde hace más de una semana. El actor, de 32 años, falleció cuando las llamas alcanzaron la finca familiar en Malibu (California), a principios de esta semana.
Según informó su madre, Shelley Sykes, a través de un emotivo comunicado en X, Rory se encontraba en la finca de Mount Malibu TV Studios, donde tenía su propia cabaña, cuando el fuego arrasó la propiedad el pasado 8 de enero. Shelley expresó estar "completamente devastada" por la pérdida de su hijo, a quien describió como una persona "hermosa y maravillosa".
Nacido el 29 de julio de 1992 en Australia, Rory nació ciego y con parálisis cerebral. Su familia se mudó al Reino Unido cuando él era muy pequeño, y fue allí donde alcanzó la fama al participar en la serie británica de los años 90 Kiddy Kapers. Más allá de su carrera actoral, Rory se destacó como un inspirador defensor de la superación de la discapacidad y como cofundador de Happy Charity, una organización dedicada a brindar "esperanza, felicidad y salud a quienes sufren", según su página web.
"Superó muchas cosas con cirugías y terapias para recuperar la vista y poder aprender a andar. A pesar del dolor, seguía entusiasmado con la idea de viajar por el mundo conmigo, desde África hasta la Antártida", escribió Shelley Sykes que recordó que había intentado apagar las cenizas del incendio forestal en el tejado de su propiedad utilizando una manguera, pero que no había podido porque no había agua.
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