Tres años sin Pau Riba, el cantautor y artista cósmico

Riba, nacido en 1948, fue un cantautor, escritor y poeta, considerado una de las figuras más influyentes y vanguardistas de la música en Catalunya. Nacido en Palma de Mallorca en el seno de una familia de intelectuales, Riba se convirtió en un referente de la contracultura y la experimentación artística desde finales de los años 60.

Su carrera musical despegó con el movimiento de la Nova Cançó, aunque pronto se desmarcó de sus postulados más convencionales para explorar caminos más alternativos y psicodélicos. Su álbum más icónico, Dioptria (1969-1970), es una obra de culto en la música catalana, con letras cargadas de ironía, crítica social y un estilo que fusionaba el folk con la experimentación sonora.

Durante los años 70, Riba profundizó en su faceta más transgresora con discos como Jo, la donya i el gripau (1971), grabado en una masía y con un sonido más cercano al rock progresivo. Su vida estuvo marcada por un espíritu nómada y bohemio, y su música reflejaba un rechazo a las normas establecidas. También exploró la literatura y el diseño gráfico, ampliando su legado más allá de la música.

En los años 80 y 90, su estilo se diversificó, experimentando con la electrónica y otros géneros, pero sin perder nunca su esencia irreverente y creativa. Su actitud provocadora y su capacidad de reinventarse constantemente lo convirtieron en una figura única dentro del panorama cultural catalán.

Además de su faceta musical, Pau Riba dejó una huella importante en la literatura con libros como Licors (1977) y Història de l’univers (2015), donde plasmó su visión del mundo con un estilo filosófico y poético.

Hasta sus últimos días, Riba continuó siendo un artista comprometido con la experimentación y la libertad creativa. Su influencia se mantiene viva en la música catalana, y su legado sigue inspirando a nuevas generaciones de artistas que buscan romper moldes y explorar nuevas formas de expresión.