El exclusivo edificio de apartamentos con vista al océano Pacífico, donde residía en la capital peruana, ha sido el lugar elegido por sus seres queridos para velar a Mario Vargas Llosa en la más estricta intimidad.
Aunque el escritor había expresado su deseo de que su despedida no fuera multitudinaria ni estuviera marcada por grandes homenajes, fue inevitable que decenas de admiradores se acercaran durante toda la jornada a los alrededores de su domicilio, donde no han dejado de llegar coronas y ramos de flores.
Diversas autoridades políticas, entre ellas la presidenta del Perú, Dina Boluarte, y los ministros Elmer Schialer, Leslie Urteaga y Daniel Maurate, acudieron a su residencia para expresar personalmente sus condolencias a la familia en este difícil momento.
Profundamente conmovidos pero serenos, los hijos del Premio Nobel salieron a las puertas del edificio para agradecer públicamente las muestras de afecto recibidas tras su pérdida. Fue Álvaro quien tomó la palabra, mientras Gonzalo y Morgana, vestidos de riguroso luto y visiblemente afectados, lo acompañaban en silencio.
"El Perú ha perdido a uno de sus mejores hombres, y nosotros, a un ser profundamente querido, a quien extrañaremos mucho. Nos queda, sin embargo, el consuelo del extraordinario padre que fue y del hermoso legado que ha dejado a Perú y al mundo", expresó Álvaro.
"Queremos agradecer sinceramente las muestras de cariño que nos han llegado de amigos, conocidos y personas anónimas que querían y admiraban a mi padre por distintas razones, y han encontrado la manera de hacérnoslo saber. Mi padre fue una figura universal, por lo que es natural que fuera de las fronteras del Perú también se sienta esta tristeza. No imaginábamos, sin embargo, la magnitud que tendría esta despedida, y nos sentimos profundamente conmovidos", añadió emocionado. También pidió respeto por la privacidad con la que desean transitar este duelo: "Hemos decidido vivir este momento en la intimidad, por eso velamos a mi padre en casa y no en un lugar público. Rogamos que se respete esa decisión".
Los restos mortales de Vargas Llosa abandonaron su residencia en un coche fúnebre a las 00:00 horas de España (16:00 hora peruana), y, cumpliendo su voluntad, serán incinerados. Por ahora, la familia no ha comunicado dónde reposarán sus cenizas.
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