El Girona pierde de forma cruel en París (1-0) en su estreno en la Champions

El Girona aprendió por las malas lo que es (o que en ocasiones es) la Champions League. Los blanc-i-vermells perdieron en su estreno en la máxima competición continental contra el el Paris Saint-Germain (1-0). Un gol en el minuto 90 del lateral portugués Nuno Mendes, que se le coló entre brazos y piernas a Paulo Gazzaniga, provocó que el equipo catalán no pudiera tener una jornada de debut redonda. 

Desde el primer minuto, los de Míchel vieron como el conjunto francés les trataba de ahogar con una presión intensa y una sólida disciplina tanto en defensa como en ataque. Aunque Gazzaniga no tuvo mucho trabajo en los primeros 45 minutos, Bradley Barcola, Marco Asensio y Zaïre-Emery mantuvieron en jaque a los de Míchel, quienes sufrían por no tener la posesión. Después de algunos contraataques iniciales, el Girona intentó calmarse con el balón, ganar confianza y alejar el juego de su área tras un inicio de gran intensidad.

Poco a poco, el conjunto catalán fue haciéndose notar. Pese a ser debutante en la máxima competición europea, comenzó a cuestionar el dominio del PSG, con Oriol Romeu e Iván Martín tomando el control en el centro del campo. Tras el descanso, los de Míchel dieron un paso adelante buscando a Stuani, su capitán, quien se quedó en el club para llevarlo de regreso a Primera y hacer historia con la clasificación a Europa. El uruguayo conectó los primeros remates peligrosos, y aunque estuvo cerca de marcar, el portero Safonov reaccionó bien. Bryan Gil también destacó con su habilidad en el desborde, mostrando por qué el Girona consiguió su primer billete a la Champions.

Sin embargo, cuando el Girona parecía en su mejor momento, el PSG estuvo a punto de castigarles en un contraataque. Dembélé se quedó solo frente a la portería, pero Krejci le robó el balón con una gran intervención. Los parisinos despertaron a partir de esa jugada, y Gazzaniga se lució con varias paradas espectaculares, incluyendo un disparo de Hakimi a quemarropa.

En los últimos 20 minutos, el PSG intensificó su dominio, y las sustituciones de Luis Enrique marcaron la diferencia. Kolo Muani, quien entró por un lesionado Asensio, junto a Kang-in Lee y Neves, llevaron peligro constante al área del Girona. Finalmente, un centro de Neves terminó colándose en la portería, dejando al Girona sin recompensa, a pesar de haber cumplido su sueño de debutar en la Champions.