Un Barça alternativo no reacciona a tiempo en Pamplona (4-2)
Los azulgranas salieron con rotaciones obligadas, pero un primer tiempo pésimo y una decisión polémica arbitral decantó el encuentro
El FC Barcelona sufrió una inesperada derrota ante el Osasuna en la jornada 8 de LaLiga, con un resultado de 4-2 en El Sadar. Este tropiezo corta la inmaculada racha del equipo catalán, que había logrado siete victorias en siete partidos hasta hoy. El encuentro, cargado de acción y polémica, puso de manifiesto las dificultades que atraviesa el Barça en esta temporada.
El partido comenzó con un Osasuna decidido a presionar desde el primer minuto. En el minuto 18, el delantero Ante Budimir abrió el marcador con un cabezazo tras un excelente centro de Bryan Zaragoza. El Barça, que presentó varias rotaciones en su alineación, justificó estas decisiones debido a una plantilla corta por las lesiones y en vista del importante partido de Champions que enfrentará la próxima semana ante el Young Boys. Sin embargo, no logró adaptarse a la intensidad del juego local. Diez minutos después, Bryan Zaragoza aumentó la ventaja con un gol que debió ser anulado por falta previa sobre Pau Victor, un pisotón que el VAR no detectó, dejando al equipo azulgrana en estado de shock.
El Barcelona mostró una imagen muy pobre en la primera mitad, pero el regreso del vestuario trajo un cambio significativo. En el minuto 53, Pau Victor, aprovechando un error del portero Sergio Herrera, logró marcar y recortar distancias. Eric García sostuvo el centro del campo con buenas defensas y pases, mientras que Jules Koundé estuvo muy activo y sólido en defensa. Pedri, por su parte, contribuyó en ambas facetas del juego, generando opciones y ayudando en la recuperación del balón.
A pesar de que el equipo parecía revivir y había una oportunidad de igualar el marcador, el partido dio un giro inesperado en el minuto 72. Tras un contraataque osasunista, el árbitro señaló un penalti a favor del local por una falta de Sergi Dominguez sobre Budimir, quien no perdonó desde los once metros, poniendo el 3-1 en el marcador.
A pesar de los esfuerzos del Barça por volver al partido, el Osasuna no se detuvo. En el minuto 85, Bretones robó un balón a Lamine Yamal en la frontal y se lució con un golazo que parecía sentenciar el encuentro. No obstante, en un último suspiro de esperanza, Lamine Yamal se redimió anotando un espectacular gol cerca de la escuadra en el minuto 89, aunque no fue suficiente para cambiar el destino del partido.
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