Manita del Barça al Young Boys: los blaugrana recuperan sensaciones en Champions (5-0)
Frenkie de Jong volvió a jugar, Ansu Fati tuvo minutos... el partido fue plácido para los de Hansi Flick
El Barça se regaló una manita contra al Young Boys (5-0) en el Estadi Olímpic de Montjuïc. Este triunfo no solo significó la primera victoria del equipo en la fase de grupos de la Champions League 2024-25, sino que también marcó el regreso a los terrenos de juego del centrocampista neerlandés Frenkie de Jong, tras cinco largos meses de ausencia por lesión, y también sirvió para que Ansu Fati acumule minutos y sensaciones.
El encuentro, aunque tempranero, era importante para los de Hansi Flick. La derrota inicial en Copa de Europa en Mónaco (2-1) y el tropiezo ante Osasuna en LaLiga (si bien es cierto que con una gran cantidad de rotaciones) habían sido los dos primeros tropiezos.
Pero Robert Lewandowski, desde los primeros minutos, abrió la cuenta con una muestra de precisión y posicionamiento, culminando una gran jugada colectiva. El Barcelona controló el partido desde el inicio, imponiendo su estilo de toque y posesión, mientras los suizos intentaban resistir con un esquema defensivo.
El dominio fue absoluto. A pesar de algunas intentonas del Young Boys, el Barça se sentía cómodo en el campo. Rapinha, inspirado, se unió a la fiesta con un gol que amplió la ventaja antes del descanso. A este ritmo arrollador se sumó Iñigo Martínez, quien, con un impecable cabezazo tras una falta ejecutada por Pedri, puso el 3-0 en el marcador.
La segunda parte continuó con el mismo guion. El hambre de triunfo se reflejó en un equipo que no aflojó. Lewandowski volvió a marcar, esta vez en una jugada a balón parado, dejando claro que el Barça no estaba dispuesto a conformarse con lo hecho. Incluso cuando Flick decidió dar descanso a sus estrellas y hacer rotaciones, el equipo siguió siendo un vendaval.
La ovación de la noche fue para Frenkie de Jong, quien, tras cinco meses, volvió a sentirse futbolista. Aunque aún debe reconectar plenamente, su regreso es una inyección de moral para un equipo que ya muestra signos de crecimiento bajo la dirección de Flick.
El partido terminó con un gol en propia puerta del Young Boys, cerrando la manita y completando una noche inolvidable para la afición culé. En la grada, los cánticos recordaban a Andrés Iniesta, mientras los hinchas disfrutaban de una nueva victoria que pone la primera piedra en el camino europeo... y con muchos goles, algo que se antoja clave teniendo en cuenta la importancia que tendrá el goal average en esta primera fase.
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