El Barça cae contra el Madrid en un Clásico polémico con dos prórrogas (90-97)

El brasileño Raul Neto jugó sus primeros minutos con la camiseta blaugrana

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Darío Brizuela pugna por un balón con el madridista Abalde. Foto: FCB

 

El Barça perdió el Clásico de la Euroliga contra el Madrid en el Palau Blaugrana (90-97) en un emocionante encuentro que necesitó dos prórrogas para decidirse y que estuvo marcado por la igualdad, la resistencia del conjunto blanco y la falta de acierto en momentos clave por parte de los azulgranas... aunque también por una clara falta blanca que los árbitros no señalaron con un +3 a favor de los de Joan Peñarroya. Esta victoria permitió al Madrid reducir la distancia con el Barça en la clasificación, colocándose a solo un triunfo de diferencia.

Fue el primer triunfo del equipo dirigido por Chus Mateo lejos del WiZink Center, poniendo fin a una de sus peores rachas de resultados. El Real Madrid, liderado por Facundo Campazzo, demostró su capacidad de lucha y perseverancia en un duelo que llegó a tener perdido en varias ocasiones tras dilapidar una ventaja inicial significativa. El enfrentamiento necesitó 50 minutos para resolverse, siendo los blancos quienes se llevaron el triunfo gracias a su determinación y mejor ejecución en los momentos decisivos.

El Barça, por su parte, no logró ampliar su ventaja en la clasificación y, aunque mejoró defensivamente al mantener el marcador empatado (74-74) al final del tiempo reglamentario, no fue suficiente para superar a su eterno rival en un Palau Blaugrana lleno. La ausencia del lesionado Nicolás Laprovittola pesó en el rendimiento del equipo dirigido por Joan Peñarroya, especialmente en el tiro exterior, donde ni Tomas Satoransky ni Juan Núñez lograron suplir ese déficit.

Errores clave al final, como los tiros fallados por Kevin Punter y Jabari Parker durante la segunda prórroga, sentenciaron a un Barça que no supo mantener la fe ni la intensidad necesarias para forzar más jugadas o desgastar psicológicamente al Real Madrid. La convicción y resistencia de los blancos fueron determinantes para evitar que el Barça aprovechara las oportunidades que generó. Este resultado deja al conjunto azulgrana tocado y al Real Madrid con aire renovado tras un Clásico que será recordado por su intensidad y dramatismo.

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