El Barça gana (0-2) y se dosifica: ya está en la final de la Supercopa de España
La previa del encuentro llegó marcada por la cautelar del CSD: Dani Olmo y Pau Víctor ya vuelven a estar disponibles
Un miércoles plagado de buenas noticias. El Barça ganó al Athletic Club (0-2) en la primera semifinal de la Supercopa de España, disputada en el King Abdullah Sports City de Yeda (Arabia Saudí), y espera jugar la final contra Real Madrid o Mallorca.
El encuentro, además, llegó marcado por la cautelar que el CSD dio a Dani Olmo y Pau Víctor, que ya vuelven a estar disponibles para Hansi Flick y que, por lo tanto, podrían jugar la final del próximo domingo 12 de enero.
Los blaugrana jugaron con hambre de gloria, dispuestos a morder. En el minuto 17, tras un inicio prometedor, el Barça rompió el hielo y encontró la red para iluminar su camino. Raphinha desató el vendaval, Pedri y Balde le dieron forma, y Gavi la culminó con maestría. En su celebración se quitó de encima el mal sabor de boca tras no marcar en más de un año.
El Barça no se conformó y buscó ampliar la ventaja con ímpetu. Lewandowski y un incisivo Raphinha no dejaron de acechar. Tan intenso fue el ataque que, en el minuto 23, Unai Simón obró un milagro al frustrar un mano a mano clarísimo del capitán blaugrana. El meta del Athletic se erigió como un muro, también deteniendo con facilidad un intento elevado, suave pero inofensivo, de Lamine Yamal. Los leones intentaron responder estirando líneas y acercándose al área rival, pero su ofensiva careció de mordida.
Tras el descanso, el Barça salió con fuego en los pies, decidido a encontrar ese 0-2 que matara las esperanzas del Athletic. Lamine Yamal lanzó un misil lejano, un disparo que levantó los ánimos, y poco después, Raphinha, tras recibir un exquisito balón largo de Iñigo Martínez, recortó a su marcador con elegancia, pero su remate, centrado y flojo, volvió a ser presa de Unai Simón.
La insistencia del Barça finalmente tuvo su recompensa. Lamine Yamal, el joven prodigio recién recuperado de una lesión, emergió como héroe. En el minuto 61, recibió un pase milimétrico de Gavi al borde del fuera de juego, encaró a Unai Simón con sangre fría y lo batió con una definición quirúrgica. El 0-2 coronaba la superioridad blaugrana y dejaba al Athletic contra las cuerdas.
Ernesto Valverde movió el banquillo buscando una reacción. Nico Williams, Mikel Vesga y Óscar De Marcos saltaron al campo. Vesga casi encuentra el gol con una volea poderosa que Szczesny despejó con autoridad, mientras que Nico amenazó con su velocidad, aunque su disparo careció de peligro real. Iñaki Williams, por su parte, rozó el descuento tras un centro impecable de Yuri, pero el destino y el VAR se aliaron contra los leones.
Con el tiempo agotándose, el Athletic intentó arrebatar algo de esperanza en un final frenético. Un gol de De Marcos fue correctamente anulado por fuera de juego, y en el 86', Iñaki Williams creyó recortar distancias, pero el VAR señaló una interferencia previa de Djaló, enterrando cualquier esperanza rojiblanca.
El Barça, liderado por un Hansi Flick estratégico, administró los minutos finales con inteligencia, introduciendo cambios clave para dar descanso a sus figuras y resistir los últimos embates. Incluso tuvieron la oportunidad de sentenciar cuando Frenkie de Jong, en un contragolpe letal, vio cómo su remate a puerta vacía fue salvado milagrosamente sobre la línea.
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