El árbitro que expulsó al madridista Bellingham denuncia una grave campaña de acoso

El colegiado José Luis Munuera Montero se ha convertido en el protagonista involuntario de la actualidad futbolística tras su actuación en el último partido del Real Madrid, donde expulsó a Jude Bellingham. Esta decisión ha desatado una oleada de críticas y acoso por parte de seguidores madridistas, hasta el punto de que el árbitro ha tenido que pronunciarse públicamente sobre la situación.

Munuera Montero ha concedido una entrevista a la Cadena COPE, en la que ha denunciado con dureza la hostilidad que está sufriendo tanto él como su familia. El árbitro ha explicado que sus sobrinos han sido "vilipendiados", que sus nueve hermanos están "destrozados" y que su padre, de 80 años, también está padeciendo la presión mediática y social. "¿Cómo podemos estar sufriendo todas estas barbaridades?", se pregunta, lamentando la situación y cuestionando el papel de los medios de comunicación.

Según el colegiado, la violencia verbal y las amenazas han alcanzado un nivel preocupante. "Estoy todo el día sin salir de casa y no me creo lo que está pasando", asegura, visiblemente afectado. También lanza una pregunta directa: "¿Quién controla esta violencia? ¿Los medios la controlan o la provocan?"

A todo este contexto se suma otra polémica: su inhabilitación temporal por parte de la RFEF, que ha abierto una investigación por un presunto conflicto de intereses. Ante estas acusaciones, Munuera Montero ha sido tajante: "Son mentiras". Según explica, su empresa solo lleva un año en funcionamiento y únicamente ha organizado "cuatro o cinco conferencias sobre los valores del deporte".

El árbitro ha asegurado que ha hablado con el departamento jurídico de la RFEF para aclarar la situación y que incluso ha mantenido contacto con el presidente Louzán, a quien ha garantizado su total disposición. A pesar de la polémica, se muestra tranquilo y confiado en poder volver a arbitrar pronto.