Desconfianza en la banca por el nombramiento de Escrivá como gobernador del Banco de España

Los bancos españoles muestran reservas ante la posible designación de José Luis Escrivá como nuevo gobernador del Banco de España, debido a su estrecha relación con el Presidente del Gobierno y por ser considerado el "autor intelectual" del impuesto a la banca, según ha publicado este miércoles 4 de septiembre Economía Digital.

La mañana del pasado martes 3, fuentes de los bancos españoles mostraban reservas ante la posible designación de José Luis Escrivá como nuevo gobernador del Banco de España, debido a su estrecha relación con el Presidente del Gobierno y por ser considerado el "autor intelectual" del impuesto a la banca.

El martes por la mañana, algunos en el sector financiero aún pensaban que la candidatura de Escrivá podría ser solo un movimiento estratégico de Sánchez, quien podría finalmente proponer a otra persona para aparentar disposición a un acuerdo con el principal partido de la oposición.

Sin embargo, después de que la Cadena SER informara al mediodía sobre la decisión del Ejecutivo de seguir adelante con el nombramiento de Escrivá, —una noticia que se espera sea confirmada oficialmente hoy por el ministro de Economía, Carlos Cuerpo—, los temores de las entidades bancarias se intensificaron.

“Preferiríamos otro perfil, claro”, comentaron en uno de los mayores bancos españoles. “Alguien con un enfoque más técnico y menos vinculado al Consejo de Ministros”, añadieron.

Todas las fuentes consultadas en los últimos días en los principales bancos de España se muestran escépticas sobre esta designación. No obstante, reconocen la amplia experiencia y conocimiento de Escrivá en el sector financiero.

“No estaba en la lista de candidatos a gobernador preparada por Cuerpo [el Ministro de Economía]; ha sido una elección personal del Presidente del Gobierno”, señalan. “Escrivá está muy vinculado a Sánchez en este momento, y la posición del Gobierno frente a los bancos no ha sido favorable, aunque hay también mucho ruido político”, apuntan.