Ebro Factory recontrata a un tercio de los antiguos trabajadores de la Nissan de la Zona Franca

Verán mejoradas sus condiciones salariales, aunque aún no se sabe la carga de trabajo que se asignará a cada uno

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Los terrenos de la antigua Nissan. Foto: Ebro Factory Zona Franca

 

La dirección de Ebro Factory, la empresa que ha ocupado las instalaciones de la antigua fábrica de Nissan en la Zona Franca de Barcelona, ha decidido convertir en indefinidos a 507 antiguos empleados de la planta, que tras el cierre de la marca japonesa a finales de 2021, mantenían contratos de formación. Esta medida se aplicará con el aumento salarial acordado a finales de 2023.

Según han explicado fuentes de Ebro y de sindicatos al digital Vozpópuli, estos contratos pasarán a ser indefinidos con un salario equivalente al del convenio del metal más un 20%, cumpliendo las condiciones pactadas en 2023. Esto implica que los trabajadores verán un aumento salarial de unos 18.900 euros brutos anuales a aproximadamente 31.300 euros, según datos sindicales.

En las últimas semanas, la dirección de Ebro Factory había expresado preocupación por los bajos niveles de producción, lo que llevó a considerar contratos de seis horas diarias y mantener los salarios de formación, alrededor de 1.575 euros brutos mensuales. Sin embargo, la alianza entre la española Ebro y la china Chery ha decidido finalmente respetar los acuerdos firmados.

En la última semana del pasado mes de septiembre, los sindicatos habían dejado claro que dicho pacto era "innegociable". A partir de ahora, estos 500 ex empleados de Nissan verán mejoradas sus condiciones salariales, aunque todavía está pendiente definir la carga de trabajo que se asignará a cada uno.

Cerca de un centenar de estos trabajadores se dedicará a la producción de los nuevos SUV de la marca Ebro, cuya homologación está en proceso, y cuya fabricación está programada para comenzar el 18 de noviembre. El resto de la plantilla deberá recibir asignaciones para sus funciones en la planta.

En una propuesta presentada la semana pasada, los sindicatos sugirieron que la plantilla podría participar en actividades productivas, en la transformación de la planta para el futuro o en formación para puestos que serán necesarios más adelante.

Inicialmente, los contratos de formación, vigentes desde febrero, beneficiaron a más de 600 trabajadores, aunque algunas decenas ya han comenzado a incorporarse a sus labores en la planta, dejando un total de 507 trabajadores con dichos contratos de formación.

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