VÍDEO: El Distrito 4.0 de Barcelona toma como ejemplo el 22@ en el BNEW

El Distrito 4.0 de Barcelona ha sido el protagonista de la charla BDISTRICT Innovation Districts, Drivers of Transformation que ha tenido lugar en la Barcelona New Economy Week (BNEW) del DFactory. El Consorci de la Zona Franca de Barcelona quiere impulsar este nuevo distrito para que se convierta en el epicentro de la innovación y la transformación. 

Para abordar este tema, han estado presentes Blanca Sorigué, directora general del CZFB y como moderadora del debate; Pere Navarro, delegado especial del Estado en el CZFB; Jordi Valls, teniente de alcalde de economía, hacienda, promoción económica y turismo; y Josep Miquel Piqué, presidente ejecutivo de La Salle Technova Barcelona. 

Este distrito tendrá una expansión de 100.000 metros cuadrados donde la innovación tecnológica se convertirá en el eje central. Esto podría traducirse en una ocupación directa de 1.500 personas y que genere 5.000 empleos indirectos. "Queremos que las empresas 4.0 impregnen al resto del polígono industrial, que las antiguas sean substituidas por aquellas que sean de 4.0", explicaba Pere Navarro.

Para fijarse en este futuro distrito, el debate ha cogido como ejemplo el 22@, un "caso de éxito" que también se enfrentó a sus retos para llegar a la relevancia que tiene hoy en día. Para conseguirlo, se ha necesitado que la capa urbana, la innovación y la dimensión social fueran las adecuadas, según Josep Miquel Piqué. 

El distrito del 22@, según Jordi Valls, "se ha copiado y se ha mejorado en otras partes del mundo", convirtiendo a Barelona en un modelo a seguir. Algunas de las ciudades que Piqué ha enumerado conforme se han inspirado en la capital catalana son Nairobi, Medellín o Boston, entre muchas otras, y es que cada año acuden más de 300 delegaciones al 22@ para ver el modelo y mirar cómo implementarlo en sus respectivas ciudades. 

Talento y conocimiento

"Sin talento no hay economía del conocimiento", remarcaba Piqué y hacía énfasis en la necesidad de que el ecosistema urbano tuviera las infraestructuras necesarias para poder albergar el crecimiento del distrito. "La integración social permite que una persona pueda conmutar entre la vida personal y laboral", y como ejemplo ponía el caso de Víctor: un padre que dejaba a su hijo en el colegio y que se transformaba en profesor de universidad, pero todo ello en un margen pequeño de tiempo, ya que es imprescindible que la conexión entre la vida personal y los servicios a los que acudir sea de pocos minutos. 

"Queremos crear un corazón que palpite y que cree riqueza y talento. Además, está al lado de un puerto y un aeropuerto", remarcaba Navarro. En cuanto al edificio Dfactory, el elemento principal de este nuevo distrito,  está dedicado por completo a la industria 4.0: "Queríamos que hubiera un elemento arquitectónico único, y que también las empresas industriales que estén aquí tengan la capacidad de relacionarse y crear nuevos proyectos".

Para que un distrito funcione, tiene que haber un elemento clave: vivienda. Sin pisos o casas en las que vivir, no se puede retener el talento nacido de la propia ciudad, ni puede llegar talento externo. Esta es una idea que han remarcado varias veces tanto Josep Miquel Piqué como Jordi Valls. 

"Barcelona es una buena ciudad para vivir, pero hay que mejorar en la vivienda para que venga talento, pero también para que el talento de aquí no se tenga que ir. Tenemos que tener una visión más metropolitana, pero Barcelona destaca en Europa de forma muy importante", añadía Valls. 

DFactory, único en el mundo

Pere Navarro remarcaba que Barcelona es una ciudad muy destacada en ámbitos como la salud, la creación de startups, el 4.0... y que crea talento y genera conocimiento "en un entorno urbano agradable". "Todos estos ingredientes es difícil encontrarlos en otros lugares", puntualizaba. 

Además, explicaba que no es posible replicarlo en todos los sitios, ya que se necesita una base previa: "Hay veces que hay que decirles a las ciudades que vienen que no pueden replicar el modelo desde 0 porque se necesita una base para que funcione, y Barcelona la tenía". También juraba que seguirían trabajando para que este distrito 4.0 "que ya es una realidad y no solo un proyecto, siga mejorando". 

"Barcelona potencia la investigación, se nos conoce por ser uno de los hubs tecnológicos más importantes de Europa y del mundo. En global, podemos ser referente mundial de la salud, en el resto de ámbitos tenemos que preguntarnos en qué podemos ayudar desde aquí", remarcaba Jordi Valls, que también puntualizaba la necesidad de conseguir capital para las empresas, para que no tengan que irse y puedan generar talento desde aquí. 

Para que funcione el distrito se necesitan elementos de conectividad, algo de lo que Barcelona presume y que cada vez aumenta más. "22@ crecerá orgánicamente, habrá metro que conectará la zona", aseguraba Piqué. 

Velocidad de cambio

Una de las ideas en las que han insistido es la velocidad a la que cambia todo. "En nuestra vida, hemos tenido una evolución que ninguna otra generación ha tenido, nadie ha evolucionado tan rápidamente. Nos hemos adaptado a las nuevas tecnologías y las instituciones debemos hacerlo", explicaba Navarro.

Uno de los ejemplos de transformación urbana que aportaba era la de Marina Prat Vermell: "Es un lugar pegado a un lugar tan industrial como la Zona Franca. Se puede producir una transición entre la industria más tradicional con actividades de servicios y residenciales".  

Por último, también han destacado la necesidad de la colaboración público-privada, lo que ayudará a que haya "más competitividad a la vez que somos sostenibles".