España está protagonizando un sorprendente resurgir económico que pocos habrían imaginado hace apenas una década. Según un reciente informe de Fitch Ratings, la economía española se posiciona como una de las más dinámicas de Europa, con un crecimiento del PIB que podría superar el 3% este año y mantenerse por encima del 2% hasta 2026. Este desempeño contrasta con los difíciles años posteriores a la crisis financiera y coloca a España como un referente de estabilidad y proyección en el continente.
España supera a Francia e Italia en exportaciones y genera empleo a un ritmo récord
Las exportaciones españolas han crecido un 11% desde 2019, un ritmo superior al de Alemania, Francia o Italia, y su peso en el PIB ya alcanza el 39%, superando a Francia (33%) e Italia (33%) y acercándose a Alemania (43%). Fitch destaca el impulso de sectores como el turismo, los servicios y la industria, que se han adaptado con agilidad a las exigencias del mercado global.
El mercado laboral también refleja el buen momento económico. Con una creación de empleo que supera la media de la eurozona, España ha reducido notablemente su tasa de paro estructural gracias al dinamismo de la población activa, impulsada por un fuerte flujo migratorio y la regularización laboral.
Los pilares del éxito: inversión, renovables y competitividad
Varios factores han contribuido a este éxito:
- Competitividad: Los costes laborales unitarios han disminuido en comparación con la media de la eurozona, favoreciendo la resiliencia del sector industrial.
- Renovables: El despliegue de energías renovables ha permitido una reducción en los costes energéticos, clave tras la crisis de 2022.
- Fondos europeos: La inversión privada y los proyectos financiados por los fondos Next Generation EU están empezando a generar retornos positivos.
El desafío pendiente: mejorar la productividad
Sin embargo, Fitch advierte que la productividad sigue siendo el talón de Aquiles de la economía española. Aunque la inversión y el empleo han crecido, el capital por trabajador y la productividad total de los factores (PTF) han avanzado de forma modesta, con un promedio de solo el 0,1% anual entre 2014 y 2023.
La agencia subraya que la recuperación de la productividad dependerá de reformas estructurales, la profundización del capital y una mejor ejecución de los fondos europeos.
Un futuro optimista con cautela
A pesar de estos desafíos, Fitch proyecta un crecimiento económico sostenible para España, con un PIB potencial medio del 2% hasta 2028. Este éxito está respaldado por una base económica más diversificada y menos dependiente de la construcción que en ciclos anteriores.
España, que una vez fue sinónimo de desequilibrios macroeconómicos, se ha transformado en un ejemplo de resiliencia y dinamismo en Europa. Si se superan los retos de productividad, el país podría consolidarse como una de las economías líderes de la región en las próximas décadas.
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