El gasto en pensiones ha alcanzado un récord histórico en España durante 2024

Las pensiones en España experimentarán cambios significativos en 2025, con una revalorización destinada a mitigar los efectos de la inflación y mejorar la situación de los colectivos más vulnerables. Las pensiones contributivas se incrementarán un 2,8%, mientras que las pensiones mínimas verán un aumento del 6%. Por su parte, las pensiones con cónyuge a cargo y las de viudedad con cargas familiares subirán un 9,1%, y las pensiones no contributivas junto al Ingreso Mínimo Vital aumentarán un 9%. Estos ajustes buscan proporcionar un alivio económico notable a un amplio espectro de beneficiarios del sistema de pensiones.

En cuanto a las pensiones de jubilación, la pensión media se incrementará de 1.441 euros mensuales a 1.481,35 euros, lo que supone un aumento mensual de 40 euros y un incremento anual de 600 euros. Las pensiones máximas de jubilación también registrarán una mejora significativa, pasando de 3.175 euros mensuales a 3.264 euros, con un aumento mensual de 89 euros. Para quienes perciben la pensión mínima, el cambio también será perceptible, ya que estas pasarán de 517 euros mensuales a 548 euros, representando una subida de 31 euros al mes y 434 euros al año.

Los autónomos jubilados también se beneficiarán de esta revalorización, aunque su situación sigue reflejando una brecha respecto al resto del sistema. La pensión media actual de los autónomos jubilados, situada en 965 euros al mes, se incrementará tras la revalorización y se estima que quedará entre 994 y 999 euros mensuales. A pesar de esta mejora, estas cifras aún se encuentran por debajo de la pensión media del sistema, lo que subraya las diferencias estructurales que afectan a este colectivo.

Históricamente, la revalorización de las pensiones en España ha sido un tema central en las políticas sociales. En la década de los ochenta, se implementaron medidas para mejorar la acción protectora, incluyendo la revalorización de las pensiones en función del índice de precios al consumo (IPC) . Sin embargo, en 2013, se aprobó el Índice de Revalorización de las Pensiones, que limitaba el aumento anual al 0,25% en períodos de déficit de la Seguridad Social . Esta medida provocó un estancamiento en las pensiones entre 2014 y 2018. Posteriormente, se retomó la actualización de las pensiones conforme al IPC, con incrementos del 2,5% en 2022, 8,5% en 2023 y 3,8% en 2024 .

Es importante destacar que el gasto en pensiones ha aumentado considerablemente en los últimos años. En 2024, el gasto alcanzó los 200.000 millones de euros, un 7% más que el año anterior . Este incremento se atribuye a la actualización de las pensiones conforme a la inflación y al aumento en el número de prestaciones debido a la jubilación de la generación del baby boom.

En relación con los autónomos, su pensión media ha mostrado una tendencia al alza en la última década, aunque sigue siendo inferior a la de los trabajadores del Régimen General. Esta diferencia se debe, en parte, a que muchos autónomos optan por cotizar por la base mínima, lo que repercute en una pensión más baja al jubilarse . Las reformas recientes buscan corregir estas disparidades, promoviendo una cotización más acorde con los ingresos reales de los autónomos.