Ambientalistas pegan sus manos al suelo de un concesionario de Porsche en Alemania
Siguen las protestas de activistas de todo el mundo tras las acciones en varios museos
La oleada de protestas de activistas continúa. Hace unos días se vivió el último episodio, en este caso por parte de un colectivo que defiende la lucha contra el cambio climático, que decidió pegar sus manos al suelo de un concesionario de Porsche en Wolfsburgo (Alemania).
En total fueron una decena larga las personas las que decidieron llevar a cabo esta acción, pero vieron como recibían poca atención por parte del concesionario: cuando terminó la jornada laboral apagaron las luces y la calefacción, dejando a los manifestantes atrapados en su propia trampa: pegados al suelo.
En protesta por haber sido ignorados de esta manera, algunos de los manifestantes se declararon en huelga de hambre, incluido Gianluca Grimalda, profesor del Instituto de Estudios Económicos Mundiales en la también localidad germana de Kiel.
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