Una menor de 15 años prende fuego a una residencia escolar y mata a 19 niñas después de que le confiscaran el smartphone

Una niña de 15 años ha sido acusada de matar "maliciosamente" a 19 niñas al prender fuego a un dormitorio de una residencia femenina de estudiantes después de que un maestro le quitara su smartphone. 

Según un comunicado del Servicio de Bomberos y Rescate de Guyana , el incendio “devastó” la Escuela Secundaria Mahdia en el oeste de Guyana justo antes de la medianoche del 21 de mayo, matando a 18 estudiantes y un niño de 5 años.

AP informó que la adolescente compareció ante el tribunal virtualmente el lunes y fue acusada como adulta por los 19 asesinatos. A la joven no se le permitió declararse culpable de los cargos, informó AP, y volverá a comparecer ante el tribunal el 5 de julio, cuando se determinará si el juicio puede comenzar.

Los investigadores alegan que la adolescente inició el incendio en el baño del dormitorio después de que le confiscaron el teléfono celular, según AP. La niña enfrenta cadena perpetua si es declarada culpable, agregó el medio.

En el momento del incendio, había 56 estudiantes mujeres presentes en el edificio de hecho de madera, informó el departamento de bomberos en su comunicado. Las ventanas del dormitorio también estaban enrejadas y cinco puertas estaban cerradas.

Muchos de los cuerpos estaban "quemados hasta quedar irreconocibles", dijo el presidente de Guyana, Irfaan Ali , en una conferencia de prensa el día después del incendio.

El asesor de seguridad nacional de Guyana, Gerald Gouveia, dijo que el empleado a cargo del dormitorio cerró previamente las puertas para que las estudiantes no se escaparan. Trágicamente, la niña de 5 años que murió supuestamente era la hija del hombre que cerró la puerta. 

Si bien no se dio a conocer el número total de heridos, unas 13 estudiantes fueron trasladados a hospitales con heridas,. Una víctima también fue llevada al centro de quemados del Hospital de la Universidad de Staten Island en la ciudad de Nueva York durante el fin de semana debido a la gravedad de sus heridas.