Pepe Mújica admite que su cáncer ha crecido y que abandona el tratamiento: "Quiero morir tranquilo"

El expresidente de Uruguay, José Mujica, de 89 años, ha comunicado en una emotiva entrevista al semanario Búsqueda que el cáncer de esófago que padece se ha extendido a su hígado y ha decidido no continuar con el tratamiento. Mujica, conocido por su vida sencilla y sus reflexiones sobre la existencia, ha pedido que lo dejen partir en paz. "El guerrero tiene derecho a su descanso", ha apuntado.

En lo que considera su despedida pública, Mujica ha sido claro y contundente: "Lo que pido es que me dejen tranquilo, que no me acosen con entrevistas al pedo y nada más. Mi ciclo terminó hace rato. Sinceramente, me estoy muriendo". Con humildad y aceptación, ha reconocido que su cuerpo, afectado también por dos enfermedades crónicas, ya no puede resistir: "No lo paro con nada".

El exmandatario ha compartido que está organizando todo para ser enterrado en su modesto terreno, el mismo en el que vivió durante décadas, incluso mientras ocupó la presidencia entre 2010 y 2015. "Estoy acomodando las cosas para los que van a quedar", ha añadido, refiriéndose a quienes continuarán habitando su hogar.

Mujica también aprovechó la ocasión para desmentir rumores sobre su implicación en el futuro gobierno del presidente electo, Yamandú Orsi. "No tengo ni idea, ni me pienso meter para nada, ni quiero saber nada porque lo peor que hay es armar un gobierno", declaró, rechazando cualquier especulación sobre su papel en la política futura.

Con serenidad y franqueza, Mujica se despide de sus compatriotas, reafirmando su compromiso con la autenticidad y la tranquilidad en el tramo final de su vida.

Los grandes cambios en su mandato

Su presidencia en Uruguay (2010-2015) se caracterizó por una serie de hechos destacados que marcaron tanto su mandato como su legado en la política mundial. 

1. Legalización del cannabis (2013)

• Uruguay se convirtió en el primer país del mundo en regular el mercado de cannabis desde su producción hasta su distribución y consumo. El objetivo principal era combatir el narcotráfico y promover un enfoque de salud pública hacia el consumo de drogas.

2. Aprobación del matrimonio igualitario (2013)

• Durante su gobierno, Uruguay legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo, consolidándose como un país pionero en derechos LGBTQ+ en América Latina.

3. Ley del aborto (2012)

• Se despenalizó el aborto en las primeras 12 semanas de gestación, siendo uno de los pocos países de la región en adoptar esta legislación en ese momento.

4. Políticas sociales y reducción de la pobreza

• Mujica continuó y fortaleció las políticas sociales iniciadas por el Frente Amplio, logrando reducir la pobreza de un 39% en 2004 a aproximadamente un 11% en 2014. También disminuyó la desigualdad económica.

5. Estilo de vida austero

• Mujica destacó por su estilo de vida humilde, donando la mayor parte de su salario presidencial a causas sociales, viviendo en su modesta chacra (granja) y rechazando privilegios asociados al cargo. Esto le valió el apodo de "el presidente más pobre del mundo".

6. Promoción de energías renovables

• Uruguay avanzó significativamente en el desarrollo de energías renovables, alcanzando más del 90% de su matriz energética proveniente de fuentes limpias como la eólica, solar e hidráulica.

7. Defensa de los Derechos Humanos

• Impulsó medidas para continuar juzgando los crímenes cometidos durante la dictadura militar (1973-1985). Además, recibió a presos de Guantánamo en un gesto humanitario hacia las víctimas de violaciones a los derechos humanos.

8. Reconocimiento internacional

• Mujica fue reconocido mundialmente por su discurso en la Asamblea General de la ONU (2013), en el que llamó la atención sobre el consumismo, el cambio climático y la necesidad de una vida más sencilla y sostenible.

9. Impulso al cooperativismo

• Promovió la economía social y solidaria, fomentando el desarrollo de cooperativas de trabajadores y el apoyo a pequeños productores.

10. Política internacional

• Mantuvo una postura de diálogo y cooperación en la región, promoviendo la integración latinoamericana a través de organismos como el Mercosur y Unasur. Su liderazgo y autenticidad lo convirtieron en una figura respetada globalmente.

La presidencia de Mujica es recordada como un período de transformaciones sociales, de compromiso con la equidad y de liderazgo ético, lo que lo convirtió en una figura emblemática a nivel mundial.