Detienen al expresidente filipino Rodrigo Duterte por crímenes contra la humanidad

El expresidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ha sido arrestado este martes 11 de marzo en el Aeropuerto Internacional de Manila por la Policía Nacional, tras una orden emitida por el Tribunal Penal Internacional (TPI). Las autoridades filipinas han confirmado la detención, relacionada con cargos por crímenes de lesa humanidad en el marco de la polémica “guerra contra las drogas” que lideró durante su mandato.

Según un comunicado oficial del Palacio de Malacañang, Duterte aterrizó en Manila alrededor de las 9:20 de la mañana (hora local) en un vuelo procedente de Hong Kong. A su llegada, agentes de Interpol ejecutaron la orden de arresto tras recibir la documentación oficial desde La Haya. El informe añade que tanto el exmandatario como los miembros de su comitiva fueron sometidos a exámenes médicos y que todos se encuentran en buen estado de salud. Duterte permanece bajo custodia policial.

A través de un vídeo publicado en Instagram por su hija, Veronica Duterte, el exlíder calificó su arresto de “ilegal” y exigió explicaciones al fiscal general, Anthony Fadullon. “¿Cuál es la ley que he violado? ¿Qué crimen he cometido?”, preguntó Duterte mientras era trasladado a la base aérea de Villamor. También alegó que su detención fue forzada y denunció la falta de una base legal clara para su captura. Por su parte, el exsecretario ejecutivo de Duterte, Salvador Medialdea, recordó que Filipinas se retiró del TPI en 2019, precisamente bajo el gobierno de Duterte, y argumentó que el tribunal no debería tener jurisdicción sobre el país.

En respuesta a la detención, la portavoz de las Fuerzas Armadas de Filipinas, Francel Margareth Padilla, afirmó que los militares están preparados para “mantener la seguridad nacional y la estabilidad”, subrayando su compromiso con el respeto a la cadena de mando.

Desde la comunidad internacional, organizaciones como Human Rights Watch (HRW) han celebrado el arresto. Bryony Lau, subdirectora para Asia de la ONG, calificó la captura como “un paso fundamental hacia la rendición de cuentas en Filipinas”. 

En un comunicado publicado en la red social X, Lau recordó que Duterte enfrenta cargos por crímenes contra la humanidad, relacionados con miles de ejecuciones extrajudiciales ocurridas entre 2011 y 2019 durante su ofensiva antidrogas. “Su arresto envía un mensaje claro: nadie está por encima de la ley”, señaló, instando al gobierno filipino a entregar a Duterte “sin demora” al TPI.