Las campanas de la discordia: ¿qué pasará con el sonido de la iglesia de Sant Llorenç de Bescanó en verano?
Hasta el pasado sábado 22 los vecinos pudieron votar sobre eliminarlo o mantenerlo
El toque de campanas de Bescanó (Gironès) ha sido protagonista de un animado debate vecinal. ¿Deben seguir sonando durante la noche o es hora de dejarlas descansar? El Ayuntamiento ha abierto una consulta popular para que sea el propio pueblo quien decida si el campanario de la parroquia de Sant Llorenç debe modificar su histórico ritual.
La iniciativa llega tras la recogida de firmas de un grupo de vecinos que asegura que el repicar nocturno interrumpe su descanso. Ahora, todos los mayores de 16 años pudieron votar hasta el sábado 22 de marzo, tanto de manera presencial como online.
Tradición frente a descanso
El conflicto gira en torno a los toques que marca el campanario entre las diez de la noche y las siete de la mañana. Para algunos, el sonido es parte del alma del pueblo; para otros, una molestia que roba horas de sueño, sobre todo en verano, cuando las ventanas abiertas convierten cada campanada en un despertador indeseado.
“Entendemos que hay quien lo encuentra molesto, especialmente en las noches de verano. Pero también reconocemos el valor cultural y sentimental que tiene”, explicó el alcalde, Xavier Vinyoles. “Por eso hemos optado por la vía más democrática: preguntar a la gente”, apuntó.
Una tradición con doble repique
Uno de los detalles curiosos del campanario de Sant Llorenç es que da la hora... ¡dos veces! A la hora en punto y, pasados poco más de 90 segundos, vuelve a sonar. Un hábito que, según algunos vecinos, duplica la interrupción del sueño.
La consulta planteaba varias opciones. ¿Apagar las campanas por la noche? ¿Únicamente durante el verano? ¿Eliminar el doble toque? ¿O mantener la tradición intacta, con repique doble de día y de noche, como se ha hecho siempre?
El pueblo tiene la última palabra
El futuro del campanario se decidirá en cuestión de días. La votación terminó el pasado día 22, de modo que esta semana se conocerá el resultado. Bescanó, a apenas siete kilómetros de Girona, escribe así un nuevo capítulo en la historia de sus campanas.
¿Ganará el silencio o la tradición? Esta semana lo sabremos.
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