Los Comuns firman un preacuerdo con el PSC: Illa se garantiza la investidura

Los Comuns han cerrado un preacuerdo con el PSC para investir al líder socialista Salvador Illa presidente de la Generalitat y que será sometido a votación de la militancia este miércoles en el Consell Nacional del partido.

Según han informado fuentes de los Comuns, la militancia del partido analizará y votará el documento preacordado con el PSC en su Consell de este miércoles, cuando intervendrá la coordinadora del partido Jéssica Albiach.

El preacuerdo entre ambas formaciones se une al alcanzado entre ERC y PSC el lunes, por lo que el apoyo de los tres partidos garantizaría la mayoría necesaria para que Illa sea investido.

Este miércoles, Comuns reunirá a su consejo nacional para decidir si respaldarán un acuerdo con el PSC, en un encuentro que se llevará a cabo a partir de las 10:30 horas de la mañana.

La reunión comenzará con una intervención pública de Jéssica Albiach, coordinadora de Catalunya en Comú y presidenta del grupo de Comuns en el Parlament. Posteriormente, los miembros del consejo deliberarán a puerta cerrada sobre la posibilidad de formar una alianza con el PSC. 

Esta decisión es de gran relevancia, ya que los seis votos de los comunes, sumados a los 20 votos de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y los 42 del PSC, serían suficientes para alcanzar la mayoría absoluta necesaria para que Illa asuma la presidencia.

"Creo que lo importante es que los Comuns tengamos un buen acuerdo con el PSC y también que ERC tenga un buen acuerdo con el PSC, porque esto será positivo para los catalanes", añadió Jéssica Albiach hace unas semanas, aludiendo a que no había necesidad de "correr" para cerrar el acuerdo, sino que era más importante lograr uno que fuera beneficioso para todas las partes. Ahora parece que los caminos conducen al mismo lugar y que el contexto político catalán despeja significativamente a su camino tras meses de incertidumbre. 

Además, la consecuencia directa de este tripartito sería la derrota de Carles Puigdemont, que albergaba la esperanza de volver a Catalunya para ser investido como nuevo president... algo que, salvo un giro radical en el último momento, no sucederá.