Elena arremete contra Puigdemont: "Se comportó de forma impropia"

Un día después de lo que se vivió con la aparición, el discurso y la fuga de Carles Puigdemont el pasado jueves 8 de agosto, las autoridades de Interior y de los Mossos d'Esquadra han comparecido para dar explicaciones.

El conseller saliente, Joan Ignasi Elena, ha dicho que "guste o no, las leyes deben cumplirse" . Elena ha apuntado que los Mossos "deben salir del debate político". "Lo he hecho y lo he pedido en muchas ocasiones, porque el cuerpo es extraordinario y un orgullo para el país", ha añadido, diciendo que el cuerpo tiene "todo su apoyo en lo que se refiere cada día".

Elena ha apuntado que "ayer hubo la intención de dinamitar un Pleno de investidura". Acto seguido, ha dicho que los agentes debían "detener a una persona (Puigdemont) que había sido una autoridad" y garantizar la seguridad del Pleno. También ha denunciado que, por parte de ciertos sectores, ha habido "un ataque al Gobierno actual, por hacerlo cómplice del españolismo, porque no les gusta lo que ha decidido".

"Los dispositivos estaban dimensionados, pero lo que no preveían era un comportamiento tan impropio por parte de quien ha sido la máxima autoridad de un país", ha dicho Elena, en clara alusión a Puigdemont.

Sin embargo, dice que habrá una investigación "como no puede ser de otra forma". "Sobre todo, de aquellos que han sido colaboradores necesarios", concluyó.

"Un día durísimo para todo el cuerpo"

Por su parte, el director general de los Mossos, Pere Ferre, apuntó que "afrontábamos la jornada como un gran reto, complejo, con grandes dosis de responsabilidad". Sin embargo, dice que los hechos "han dejado el cuerpo en una situación que no se merece".

"Ayer fue un día durísimo, inmerecido, para el conjunto del cuerpo", ha dicho, pero asegura que "con esfuerzo y abnegación seguiremos construyendo a una de las mejores policías del mundo".

El plan, detallado

El comisario jefe, Eduard Sallent, ha detallado que "cuando hacemos un dispositivo contemplamos todos los escenarios". Sallent dice que trabajaban "desde hace semanas", con la intención de "garantizar el orden y la seguridad ciudadana, mantener el orden constitucional y dar cumplimiento de la orden de detención de Carles Puigdemont por un delito de malversación".

Sallent asegura que algunos de los asistentes actuaron con violencia contra agentes en varios puntos de acceso de la Ciutadella, en la calle de Pujades.

Sobre la detención, dice que "se transmitió a todos los efectivos". "Nuestra intención era hacerla en el lugar más idóneo (junto al parque de la Ciutadella), garantizando los otros dos principios jurídicos, garantizar el orden público y la celebración del Pleno", apunta, pero denuncia que Puigdemont "entró acompañado de una masa de personas y autoridades para dificultar la actuación de los Mossos d'Esquadra".

"Cuando terminó, los efectivos intentaron aproximarse a Puigdemont, pero un muro lo evitó", detalla, añadiendo que el expresidente se puso un sombrero para crear aún más confusión. "Al huir, se activó el dispositivo jaula, que se amplió hasta que se desactivó a las 13.22 horas", añade.

Sallent confirma que se han detenido a dos Mossos, uno relacionado con el vehículo y el otro con su protección y que hay una investigación en marcha. También ha dicho que valoran "las responsabilidades penales de otras personas".

El comisario jefe acusó de "deslealtad al cuerpo", y dijo que "el dispositivo estaba hecho para detener a Puigdemont", y dijo que el lugar pensado era "las cercanías del parque de la Ciutadella". Del mismo modo, Sallent asegura que "no hemos negociado nada ni con el señor Puigdemont ni con su entorno" .