¿Puede volver Susana Díaz a pelear por liderar el PSOE de Andalucía?

La que fuera presidenta de la Junta de Andalucía entre septiembre de 2013 y enero de 2019, Susana Díaz, podría volver a pelear por liderar el PSOE en esta comunidad autónoma.

Díaz dejó el cargo, entonces, para aspirar a la secretaría general de los socialistas, pero terminó perdiendo contra Pedro Sánchez, de modo que terminó en el Senado, en el que actualmente tiene un asiento.

Sin embargo, desde hace tiempo mantiene un enfrentamiento con el líder socialista en la comunidad, Juan Espadas, y el último capítulo de este pique fue en las redes sociales, en las que acusó a Espadas de intentar "reescribir" el pasado "para quedar bien". 

"Algunos, para buscar su sitio, dicen muchas tonterías", publicó posteriormente la política sevillana en un mensaje que incluía un vídeo con recortes de prensa en los que ella defendía la inocencia de Manuel Chaves y José Antonio Griñán durante el proceso de enjuiciamiento de los ERE y su condena, junto con casi una veintena de exaltos cargos.

Juan Espadas negó la gresca al día siguiente en el Parlamento de Andalucía, pero para entonces el debate ya estaba servido. Para entender el choque, hay que viajar en el tiempo hasta el pasado jueves, cuando se celebró el Comité Director del PSOE andaluz. Algunos de los 27 dirigentes que tomaron la palabra afearon a Espadas la actitud que el partido tomó con la generación de exdirigentes implicados en los ERE. Ya en su réplica en aquella reunión de cinco horas, Espadas dio pistas sobre lo que luego desarrolló en su artículo del Huffington Post: el PP ha armado un "montaje" con el caso para su beneficio político, pero la dirección del PSOE andaluz también erró en el diagnóstico y en la respuesta.

El dardo a Susana Díaz se entiende después de que en la cúpula del PSOE andaluz hayan mostrado su disgusto por las intervenciones de algunos de los afines a la expresidenta de la Junta, como Manuel Jiménez Barrios, exvicepresidente de la Junta. Pero el artículo de Espadas y la respuesta de Díaz generaron un debate en las filas socialistas. "No lo ha hecho con las vísceras, sino con la cabeza", expresaba una fuente socialista a esta redacción horas después del enganche. La duda era entonces con qué objetivo, sobre todo después de que el entorno de la expresidenta saliera en su defensa para recordar viejas rencillas. "La gente está cansada", apuntó un dirigente del PSOE, crítico con los pasos dados por Espadas y Díaz en los últimos días.