Esto es lo que Junts exige al PSOE para apoyar el techo de gasto

El PSOE y Junts están en medio de complejas negociaciones para alcanzar un acuerdo sobre el techo de gasto en el Congreso de los Diputados. Junts ha planteado exigencias que incluyen el acceso a niveles intermedios de poder en el Ayuntamiento de Barcelona y en empresas municipales, aunque el Partit Socialista de Catalunya (PSC) asegura que esto no ocurrirá. Pese a estas demandas, en el Gobierno central hay optimismo sobre el curso de las negociaciones.

El último contacto público entre ambas partes tuvo lugar en Suiza, lo que ha generado expectativas de que un acuerdo es posible. Para el PSOE, la aprobación de la senda de déficit es fundamental para avanzar en la legislatura, mientras que Junts busca concesiones significativas que les permitan conseguir logros políticos comparables al acuerdo que ERC obtuvo con el "cupo catalán". A pesar de las tensiones, la negociación sigue adelante y las amenazas recientes de la líder de Junts, Laura Borràs, sobre una posible moción de censura, parecen más tácticas que una verdadera posibilidad.

Uno de los puntos más críticos de la negociación es la demanda de Junts de aumentar el margen de déficit de las comunidades autónomas, lo que les permitiría más capacidad de endeudamiento. Esta propuesta podría reducir en unos 12.000 millones de euros el gasto disponible para la Administración central, generando resistencias en el Gobierno. Sin embargo, Moncloa ha dejado claro que cualquier aumento en los recursos para las comunidades sería gracias a la gestión de Pedro Sánchez.

Los socialistas temen que ceder demasiado en estas negociaciones pueda complicar la posterior aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, ya que todo está vinculado. No obstante, Junts se mantiene firme en su intención de negociar sin romper del todo las relaciones, ya que sus siete diputados en el Congreso son cruciales para la estabilidad del Gobierno. Ambas partes están explorando concesiones que podrían incluir a otros actores políticos, como Sumar, para redistribuir el déficit a favor de las comunidades autónomas.

Aunque hay avances, Junts sigue demandando claridad sobre cómo se repartirá el déficit, advirtiendo que no votarán a favor de nada que no esté claramente definido. A pesar de las tensiones, las negociaciones continúan y Puigdemont sigue ejerciendo presión sobre Sánchez para obtener mayores concesiones.