Isabel Díaz Ayuso, muy crítica con Pedro Sánchez: "Es un cobarde que ha decidido intentar destruirme"

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha concedido una entrevista en el programa Espejo Público, donde no ha ahorrado críticas hacia el Gobierno de Pedro Sánchez. La líder madrileña considera que está siendo objeto de una "operación de Estado" que involucra a diversos poderes públicos y cuyo objetivo sería destruirla políticamente.

Ayuso calificó la situación como "esperpéntica" y "profundamente desagradable". Según ella, se ha instrumentalizado la vida privada de su pareja para dañarla. "Esto empieza desde el presidente del Gobierno que es un cobarde que ha decidido intentar destruirme y ha puesto en funcionamiento a todos los poderes del Estado", afirmó.

La presidenta también analizó la dimisión de Juan Lobato como líder del PSOE en Madrid, tras presentar ante notario mensajes que su partido le envió sobre los problemas fiscales de la pareja de Ayuso. Aseguró que, en esta trama, habrían intervenido la Fiscalía General, la Abogacía del Estado y funcionarios públicos. Además, denunció el uso de "insultos y difamaciones" por parte de ministros, lo que ha derivado en querellas legales.

Ayuso señaló directamente al gabinete de Pedro Sánchez, liderado por Óscar López, como autor de esta estrategia. "Han estado troceando una inspección fiscal y distribuyendo información a medios afines para relacionarme con corrupción", aseguró. También recordó que Juan Lobato utilizó durante meses la causa fiscal de su pareja para atacarla políticamente, pero que, al prever consecuencias legales, decidió acudir a un notario.

"Es el caso de una persona que tiene una multa de Hacienda, quiere pagarla y no le dejan", explicó Ayuso, denunciando que se trató de una maniobra política que implicó a periodistas, jueces y figuras públicas. Añadió que este tipo de inspección fiscal nunca había llegado tan lejos y subrayó que su pareja no tiene relación con su vida laboral, acusando al Gobierno de buscar su "destrucción personal y difamación".

La presidenta concluyó con un mensaje contundente: “Se trata de una operación que mezcla instituciones públicas con intereses partidistas, y lo que se pretende no es justicia, sino acabar conmigo”.