Una alianza entre Aragón y Galicia busca frenar los "privilegios" de la financiación catalana

El presidente de Aragón, Jorge Azcón, y su homólogo gallego, Alfonso Rueda, han firmado este miércoles un nuevo acuerdo para reactivar y actualizar la Declaración de Santiago, un documento suscrito en 2021 junto a otras seis comunidades autónomas (La Rioja, Cantabria, Castilla y León, Extremadura, Castilla-La Mancha y Asturias). Este acuerdo responde a lo que consideran "privilegios" otorgados a Catalunya, en un momento en que la reforma del sistema de financiación autonómica es "más necesaria que nunca".

La reunión se celebró en Zaragoza, en el edificio Pignatelli, sede del Gobierno de Aragón, y marcó la primera visita oficial de un presidente autonómico desde que Azcón asumió el liderazgo del Ejecutivo aragonés. Tras la firma, ambos presidentes visitaron la Basílica de Nuestra Señora del Pilar, donde Rueda también se reunió con la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca.

Reivindicaciones de la Declaración

El documento firmado por los líderes autonómicos reafirma la vigencia de los principios establecidos en 2021, denunciando que, desde entonces, no se han producido avances significativos en la reforma del sistema de financiación autonómica. En él se rechazan las negociaciones bilaterales que favorecen a determinadas comunidades y se exige un modelo que respete los principios constitucionales de igualdad y solidaridad.

Además, subraya la necesidad de que el nuevo sistema tenga en cuenta el coste real de los servicios públicos, un punto central para territorios con alta dispersión y envejecimiento poblacional como Aragón y Galícia.

Azcón destacó que Aragón cuenta con 745 centros sanitarios por millón de habitantes, frente a una media nacional de 275, lo que genera un coste elevado para garantizar servicios básicos. De forma similar, Rueda señaló que Galícia concentra la mitad de todos los núcleos de población de España, lo que también encarece la prestación de servicios.

En educación, ambos presidentes apuntaron que sus comunidades requieren más infraestructuras que la media nacional. Aragón tiene 433 colegios por cada 100.000 alumnos, mientras que Galícia alcanza los 454, frente a los 346 de media en el resto del país.

Críticas a la condonación de deuda para Catalunya

Uno de los puntos más controvertidos abordados en la reunión fue la condonación de deuda negociada entre el Gobierno central y ERC. Jorge Azcón denunció que esta medida implica que “los aragoneses paguen la deuda generada por los independentistas”, al tiempo que subrayó que esta propuesta dinamita los principios de igualdad y solidaridad.

Por su parte, Alfonso Rueda advirtió que “la deuda no desaparece, simplemente se reparte”, calificando la medida como un "negocio ruinoso" para el resto de las comunidades autónomas. Según el presidente gallego, este tipo de acuerdos bilaterales ignoran la necesidad de abordar de forma multilateral un sistema de financiación que cubra las necesidades reales de todos los territorios.

Urgencia de una reforma multilateral

Ambos dirigentes coinciden en que la reforma del sistema de financiación debe ser "urgente e inmediata". Azcón señaló que los presupuestos son limitados y que destinar recursos a condonar deudas perjudica la capacidad de las autonomías para garantizar servicios públicos de calidad.

En este sentido, ambos líderes destacaron que su propuesta no es un ataque directo contra Catalunya, sino una defensa de los principios de igualdad que deben regir el modelo de financiación autonómica.

“Lo que es de todos se discute entre todos, sin negociaciones bilaterales que excluyan al resto”, concluyó Rueda.