¿Quién protege a Aldama? El empresario sigue fuera de la cárcel sin aportar pruebas contra el PSOE

El empresario Víctor de Aldama, señalado como el presunto "conseguidor" en el caso Koldo y descrito por la Unidad Central Operativa (UCO) como la figura principal de una trama de fraude millonario en el sector de hidrocarburos, continúa libre pese a los contundentes indicios de su implicación en delitos fiscales y de blanqueo de capitales. Su libertad, apoyada por la Fiscalía Anticorrupción, contrasta con su insistencia en lanzar graves acusaciones sin pruebas contra el PSOE y figuras cercanas al Gobierno.

Acusaciones sin sustento

Aldama volvió a protagonizar titulares tras una entrevista en Cadena COPE, donde afirmó que la mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, y la esposa del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, Sonsoles Espinosa, tendrían cuentas con millones de euros en el extranjero. Según el empresario, estas denuncias se basan en una copia de un informe recibido de un "particular".

Sin embargo, estas acusaciones ya han sido archivadas por la Fiscalía Anticorrupción por falta de credibilidad. Fuentes fiscales confirmaron que las denuncias eran infundadas y guardaban similitudes con los bulos lanzados en su día por el exjuez Fernando Presencia. Este patrón de señalamientos infundados no es nuevo en Aldama, quien previamente acusó a altos cargos del PSOE de recibir sobornos y comisiones, sin presentar evidencia alguna que respalde sus declaraciones.

Una trama de corrupción en la sombra

Pese a su historial de acusaciones sin pruebas, Aldama enfrenta una investigación que sí cuenta con fundamentos sólidos. Según la Guardia Civil, es la figura central de una red criminal que habría defraudado más de 182 millones de euros en IVA a través de operaciones fraudulentas con hidrocarburos. Las autoridades sospechan que Aldama dirigió el blanqueo de casi 74 millones de euros mediante transferencias a países como China, Colombia y Dubái, utilizando contratos ficticios de asesoramiento.

Además, el informe de la UCO detalla un entramado de empresas pantalla y testaferros diseñados para evadir impuestos y canalizar ganancias ilícitas hacia el extranjero. La red criminal habría operado de manera sistemática desde septiembre de 2022 hasta febrero de 2024.

¿Por qué sigue en libertad?

A pesar de las abrumadoras pruebas en su contra, Aldama fue puesto en libertad por orden del juez Santiago Pedraz, quien accedió a la petición de su defensa, respaldada por la Fiscalía Anticorrupción. La excarcelación de Aldama, un empresario con recursos y conexiones, plantea interrogantes sobre las prioridades de la justicia.

Mientras que sus acusaciones contra el Gobierno reciben una amplificación mediática desproporcionada, las investigaciones sobre la trama de corrupción parecen avanzar a un ritmo mucho más lento. La situación genera sospechas sobre si su libertad está vinculada a su voluntad de lanzar ataques políticos sin pruebas.

Justicia a dos velocidades

El caso de Víctor de Aldama refleja una preocupante dualidad en el sistema judicial español: mientras las acusaciones infundadas contra figuras del Gobierno ganan eco mediático, las graves imputaciones que pesan sobre el empresario parecen no recibir la misma atención.

Por ahora, Aldama sigue fuera de la cárcel, sin aportar una sola prueba contundente contra el PSOE, pero con una larga lista de evidencias en su contra por uno de los mayores fraudes fiscales del país. ¿Hasta cuándo se permitirá que un presunto cabecilla de una red criminal utilice su libertad para lanzar acusaciones infundadas mientras la justicia no avanza en su caso? La respuesta sigue siendo un enigma.