El exministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha salido al paso de las recientes informaciones publicadas por el periodista Alejandro Entrambasaguas y el diario El Debate, que aseguran que posee un chalé en Perú valorado en 1,2 millones de euros. Ábalos ha desmentido tajantemente estas acusaciones, calificándolas de “bulo” y aclarando que el inmueble en cuestión es en realidad un centro social construido por la Fundación FIADELSO, una organización dedicada al desarrollo comunitario en la ciudad de Chimbote.
Según la información difundida por Entrambasaguas, en las escrituras de la propiedad aparece el nombre de Ábalos como propietario, y se insinúa que la construcción del inmueble se realizó con dinero público destinado a una ONG. Sin embargo, el exministro ha explicado que, debido a que la fundación no tenía personalidad jurídica en Perú en el momento de la adquisición del terreno, la escritura se hizo a su nombre y al del entonces secretario de la organización, pero siempre con la finalidad de que el inmueble perteneciera a la fundación.
A través de un extenso comunicado en redes sociales, Ábalos ha detallado que el centro social fue desarrollado para ofrecer servicios culturales y sociosanitarios a la comunidad de Chimbote, y que actualmente se encuentra registrado en la municipalidad local como parte de la fundación. Además, ha señalado que el edificio fue ocupado ilegalmente en 2019 por un grupo de personas que ahora intentan aprovechar su situación personal y política para apropiarse del inmueble.
Entrambasaguas se relacionó con los okupas
El exministro ha acompañado su desmentido con documentos que prueban la citación judicial del presunto ocupante ilegal del centro, Segundo S. Valle, así como vídeos que evidencian la relación entre Valle y Entrambasaguas. En su respuesta, Ábalos acusa al periodista de difundir información manipulada con fines políticos y de apoyar a quienes buscan apropiarse del edificio.
Este nuevo episodio se suma a la creciente ola de desinformación que circula en la esfera política española, donde noticias sin contrastar y teorías conspirativas ganan terreno en determinados sectores mediáticos. Mientras tanto, Ábalos ha dejado claro que no permitirá que este centro social termine en manos de okupas y que su destino debe estar en la municipalidad de Chimbote, asegurando que seguirá defendiendo la verdad frente a lo que considera “un nuevo bulo sin escrúpulos”.
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