El Supremo advierte a Pedro Sánchez sobre las consecuencias de la reforma del delito de sedición

Si el Gobierno accede a reformar el Código Penal, como exige ERC, el fallo quedará desfasado y podría ser cuestionado por la Justicia europea, alertan desde el Supremo.

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Pedro Sánchez dispuesto a modificar el delito de sedición/ @EP

 

ERC, PNV y Bildu  tumbarán las enmiendas a la totalidad de grupos como PP, Vox o Ciudadanos para que Pedro Sánchez saque adelante los últimos presupuestos de esta legislatura. 

 

A cambio ERC, quiere que se retome el debate sobre la reforma del Código Penal para rebajar a la mitad las penas por el delito de sedición. Parece ser que la voluntad por parte del Gobierno del presidente Pedro Sánchez es llevarla a cabo y desde el grupo socialista en el Congreso aseguran que hay consenso en sacar adelante el cambio legislativo, si se tiene la  mayoría suficiente y midiendo los tiempos políticos con unas elecciones municipales y autonómicas a la vuelta de la esquina.

 

LA RUTA DE LA DESJUDIALIZACIÓN DEL PROCÉS

 

 Desde ERC ha centrado su hoja de ruta en que en Europa quede desacreditada la sentencia del Tribunal Supremo sobre el procés que le envió a prisión a una buena parte de los líderes independentistas. El Gobierno ha asumido  en la mesa de diálogo bilateral con la Generalitat ese punto de negociación.

 

Para el independentismo, que Estrasburgo reconozca una vulneración de sus derechos sería una victoria en el relato y facilitaría la celebracíon de nuevos referéndums en Catalunya. Y cuando se revisara la sentencia, las penas impuestas estarían desfasadas.

 

Desde el Supremo han advertido al gobierno de Pedro Sánchez que si efectivamente  reducen las penas por el delito de sedición, se llevaría a una desautorizanción del fallo ante la Justicia europea. Los cambios que se introduzcan en el Código Penal podrían conllevar una interpretación de "desproporcionalidad". Algo que supondrá una "nueva afrenta" a la Justicia por parte del Ejecutivo. El cuestionamiento político del fallo del 'procés', que cumplió el pasado 14 de octubre tres años, se interpretaría como un "varapalo" a uno de los procesos más importantes de España y tendría una gran repercusión internacional.  

 

Así cuando el Congreso apruebe por mayoría el cambio del Código Penal en Europa, se impondrá el relato del "abuso de unos tribunales" defendido por los independentistas condenados. Abriéndole la puerta a regresar a Catalunya al ex president  Carles Puigdemont .

 

En sus intervenciones públicas, Pedro Sánchez, defiende la necesidad de equiparar las penas a los estándares europeos,  con otros baremos.  Con una rebaja de la pena del delito de sedición a menos de cinco años, siguiendo la línea de la tipificación de Europa, la prisión preventiva de Carles Puigdemont se acortaría e incluso podría no acordarse. Pese a estar acusado de rebelión, sedición y malversación, el precedente de la sentencia del Supremo a los otros procesados 'anula' el primero de los delitos, ya que el tribunal determinó que hubo sedición, pero no rebelión.

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