Confirmado: el debate de investidura con Feijóo como candidato será el 26 y 27 de septiembre

La presidenta del Congreso de los Diputados, Francia Armengol, ha confirmado que el debate de investidura del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se celebrará los días 26 y 27 de septiembre. 

De este modo, se evita la opción más rápida posible, la del 30 de agosto, y se da más tiempo al candidato designado por el Rey para tratar de obtener más apoyos que los que tiene ahora mismo. La intención de la formación es comenzar, la semana del 28 de agosto, las conversaciones con los grupos para tratar de conseguir los cuatro apoyos que les faltan.

En este sentido, los populares, a través de declaraciones de su secretaria general, Cuca Gamarra, y del vicesecretario de Institucional del partido, Esteban González Pons, se han mostrado dispuestos a hablar con los independentistas para la investidura de Feijóo, salvo con Bildu.

"Hay una realidad parlamentaria y convocaremos a los grupos parlamentarios a esa ronda de contactos", ha sostenido Gamarra, pero insiste en que "la responsabilidad es de todos".

LOS GRUPOS SE FORMARÁN EL LUNES 28 DE AGOSTO

Los grupos parlamentarios del Congreso no quedarán constituidos formalmente hasta el próximo lunes 28, cuando esté prevista que la Mesa de la Cámara dé el visto bueno a las inscripciones realizadas, y después habrá que reunir a la Junta de Portavoces para organizar el debate.

¿QUÉ OCURRIRÍA SI FEIJÓO NO LOGRA SER INVESTIDO?

En caso de que Feijóo, no logre obtener los apoyos necesarios para su investidura en el pleno programado para los días 26 y 27 de septiembre, se activa un plazo de dos meses antes de que se considere una repetición de las elecciones, fijada para el domingo 14 de enero. La correspondiente campaña electoral tendría una duración de una semana, comenzando el 5 de enero.

Durante este periodo, tanto Feijóo como Pedro Sánchez, intentarán asegurar una mayoría para la formación de un nuevo gobierno. El proceso implicaría que el Rey realizaría una nueva ronda de consultas con los líderes políticos y, una vez concluida, propondría un nuevo candidato a la investidura. Si en los dos meses posteriores a la primera votación fallida no se logra investir a ningún candidato, el Rey tomaría la decisión de disolver las Cortes y convocar nuevas elecciones.

De acuerdo con la modificación realizada en la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) en 2016 para situaciones específicas de repetición electoral, las elecciones se celebrarían 47 días después de la disolución de las Cortes. Dado que el inicio de este período se cuenta a partir de la primera votación fallida de investidura, la fecha en la que se celebrarían las nuevas elecciones estaría relacionada con el día elegido por Armengol para llevar a cabo la investidura.