El Consell de la República se autoinmola con una consulta que han ignorado el 95% de sus afiliados

El Consell de la República, una entidad creada por el expresident Carles Puigdemont para "avanzar hacia la independencia de Catalunya", según reza en su página web, no está pasando sus mejores momentos. Después de que Puigdemont decidiera disolver la Asamblea del Consejo a finales de agosto para eliminar a las voces disidentes en su negociación con Pedro Sánchez, el organismo ha intentado sacar pecho lanzando una consulta a sus bases para que frenen el posible acuerdo. Y, como era previsible, las bases han avalado bloquear la investidura. Sin embargo, el resultado ha dejado patente una realidad más evidente que el propio resultado: el consell está agonizando, y se ha autoinmolado con un plebiscito que ha demostrado que su capacidad de convocatoria es nula. 

De los más de 90.000 afiliados que tiene el Consell de la República, sólo han votado 4.021 personas, lo que supone un 4,45% de la participación. Y, a pesar de que el 74,9% de los votantes ha decidido bloquear la investidura de Sánchez, el 95,55% de las personas inscritas al Consell ha decidido ignorar la votación, dejándola al borde de la irrelevancia. 

¿PELIGRO PARA PUIGDEMONT?

El resultado de la votación, que a primera vista podría parecer un lastre para Puigdemont, ha acabado reforzando su liderazgo. La relación del expresident y el Consell estaba desmoronándose en los ultimos meses desde que empezaron las negociaciones para investir a Pedro Sánchez. Se lanzaron acusaciones cruzadas graves, y los miembros del Consell llegaron a afirmar que Puigdemont había entrado en una "deriva autoritaria". 

El juego ha sido claro: Puigdemont quería deshacerse de todos los obstáculos que puedan dificultar su negociación con Pedro Sánchez y el Consell de la República ha luchado por no ser dilapidado por su propio creador. Y como en toda batalla, ha habido un ganador, que en este caso ha sido Puigdemont. El exalcalde de Girona, con sus últimos movimientos, ha conseguido que la entidad pase a la absoluta irrelevancia, hasta el punto de anunciar una consulta crucial a bombo y platillo y que la participación se quede por debajo del 5%. 

Teniendo en cuenta que sólo 4.000 personas han decidido bloquear la investidura, parece complicado que este resultado pueda afectar en algo a las decisiones que pueda acabar adoptando Carles Puigdemont. Y sí así fuera, ¿4.000 catalanes decidirán el futuro de España? Todo es posible.