Salarios, viviendas, dietas y privilegios del nuevo gobierno de Sánchez

La reciente investidura de Pedro Sánchez no solo marca el inicio de una nueva etapa en Moncloa, sino que también desencadena la conformación de los ministerios para la próxima legislatura y la designación de quienes ocuparán los cargos clave del Gobierno. Estas posiciones, altamente codiciadas, no solo conllevan un atractivo salario, sino también jugosas dietas y beneficios adicionales. Tras el aumento salarial del 4% en 2023, con la posibilidad de otro incremento en 2024, Sánchez se posiciona como el mejor remunerado del Gobierno, con un salario base de 90.010,20 euros anuales.

En detalle, cada ministro de Sánchez percibirá un sueldo de 79.415,16 euros brutos anuales, mientras que los vicepresidentes del Gobierno disfrutarán de emolumentos que ascienden a los 84.600,72 euros anuales. Por debajo de ellos se encuentran los secretarios de Estado y subsecretarios, con salarios de 77.903,18 euros y 69.059 euros respectivamente, aunque algunos pueden sumar complementos que elevan sus ingresos. Un dato destacado es que Ángela Rodríguez Pam, secretaria de Estado de Igualdad, superó en su último año incluso al presidente del Gobierno y a su superior, Irene Montero, alcanzando los 119.566 euros.

Además del sueldo, los ministros tienen derecho a residir en viviendas oficiales en Madrid. Según datos de Newtral, 14 de los 22 ministros de la legislatura anterior contaban con una residencia proporcionada por la administración pública, algunas de dimensiones considerablemente amplias, como el piso de 443 m2 de Yolanda Díaz o la vivienda de 413 m2 de Miquel Iceta.

Los gastos relacionados con el trabajo, como viajes oficiales, traslados en taxi, comidas y combustible, están cubiertos por el Estado, eliminando la necesidad de que estos altos cargos sufraguen estos costos de su propio bolsillo. Además, los ministros, vicepresidentes y secretarios de Estado tienen derecho a coche oficial y, en algunos casos, a escolta, servicios financiados por el país.

A estas ventajas se suman las dietas que algunos ministros del Congreso de los Diputados reciben para su estancia en Madrid. Aunque algunos ministros tienen viviendas oficiales o residan permanentemente en La Moncloa, han cobrado estas dietas, respaldadas por una sentencia del Tribunal Supremo.

En resumen, los altos cargos del Estado, además de sus generosos salarios, disfrutan de la comodidad de tener pocos gastos, ya que el Estado cubre sus desplazamientos, gran parte de sus comidas y otros gastos relacionados. Un conjunto de privilegios que han sido aprovechados por los ministros, vicepresidentes y secretarios de Estado durante el mandato anterior y que seguirán utilizando en la próxima legislatura.