17A: 5 años después, 250 víctimas de los atentados de Barcelona no han solicitado su indemnización
El ataque, al que hay que sumar un segundo episodio al día siguiente en Cambrils, se cobró la vida de 16 personas. También murieron ocho de los terroristas
La tarde del 17 de agosto de 2017 quedó, para siempre, marcada en el imaginario colectivo de Barcelona. Una furgoneta, conducida por Younes Abouyaaqoub, recorrió más de medio quilómetro de la Rambla, atropellando y disparando a muchas de las personas que paseaban por uno de los espacios más emblemáticos de la ciudad. La capital de Catalunya quedó, para siempre, golpeada por el terrorismo islámico; horas después de los hechos, Estado Islámico reivindicó el atentado.
El ataque, al que hay que sumar un segundo episodio al día siguiente en Cambrils, se cobró las vidas de 16 personas: Francisco López Rodríguez, Xavier Martínez, Pepita Codina, Silvina Pereyra, Julian Cadman, Luca Russo, Bruno Gulotta, Carmen Lopardo, Elke Vanbockrijck, Jared Tucker, Ian Moore Wilson, Maria de Lourdes Ribeiro, Maria Correia, Pau Pérez Villán, Ana María Suárez López y una mujer alemana, de 51 años, cuya identidad no ha trascendido. También terminaron muriendo ocho terroristas.
LOS HECHOS
Los momentos iniciales fueron muy confusos, como suele pasar en cualquier suceso de estas características. La realidad es que el vehículo, tras arrollar personas y golpear algunos de los quioscos de la Rambla, empezó su camino en la parte superior del paseo, a tocar de la plaça de Catalunya, y lo terminó cerca del mural de Joan Miró, a la altura de la calle Hospital. Abouyaaqoub, aprovechando el pánico, entró en La Boqueria y acabó en Zona Universitària, donde apuñaló a un joven para robarle el coche.
En su huida, Abouyaaqoub atropelló a una agente de policía tras saltarse un control. El coche fue interceptado en Sant Just, ante el edificio Walden, pero el conductor logró escapar y los Mossos le pierden la pista.
Durante la tarde se encontró una segunda furgoneta relacionada con el atropellamiento en Vic. Entonces, se hicieron las primeras detenciones en Ripoll, donde se situó el centro de radicalización de los artífices del atentado. Posteriormente, el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, relacionó el atentado terrorista en Barcelona con la explosión que se produjo un día antes, el 16 de agosto, en una casa en Alcanar por una acumulación de gases.
La madrugada del 18 de agosto se completó el atentado con un nuevo ataque, esta vez en Cambrils, cuando un Audi A3 con cinco personas en su interior embistió un vehículo policial en un control cerca del paseo marítimo. Los agentes lograron abatir a cuatro de sus cinco ocupantes, aunque el quinto, en su huida, logró apuñalar a una mujer, que falleció en el hospital. Todos los terroristas llevaban cinturones de explosivos falsos e iban armados con armas blancas. La actuación de los Mossos logró evitar una masacre en el paseo marítimo, que estaba lleno.
EL JUICIO
Más de tres años después de los hechos, el martes 10 de noviembre de 2020, empezó el juicio en la Audiencia Nacional, donde se escuchó a más de 200 testigos.
Meses después, el 27 de mayo de 2021, la Audiencia cerró el juicio imponiendo penas de entre 8 y 53 años y medio (más altas de las que solicitaba la Fiscalía) a Mohamed Houli Chemlal, Driss Oukabir y Said Ben Iazza, los tres acusados de formar parte de la célula terrorista de Ripoll que perpetró los atentados. Los autores materiales del atentado murieron entre los días 17 y 18 de agosto de 2017, de manera que ninguno de ellos tuvo que rendir cuentas ante la justicia.
El mes pasado, el mismo tribunal rebajó algunas de las penas, aunque la decisión no supondrá ningún cambio, porque se mantiene en 20 años el máximo de tiempo que permanecerán en prisión.
LAS VÍCTIMAS
Lamentable boicot independentista al acto de homenaje a las víctimas del 17A en Barcelona
Un año más, la Rambla será el escenario de un acto de homenaje a las personas que fueron asesinadas tal día como hoy hace cinco años. El Ayuntamiento anunció un acto en el memorial que se instaló en el Pla de l'Ós de la Rambla, con la presencia de víctimas, familiares y representantes institucionales. La alcaldesa, Ada Colau, liderará la representación del gobierno municipal, aunque también se espera la presencia de todos los grupos políticos y autoridades de la Generalitat y del Gobierno.
Además, tanto la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (ACVOT), como la Plataforma 17A y POLITEIA participarán en un acto que llega con un notable malestar por parte de las asociaciones de víctimas. De hecho, Robert Manrique, miembro de la Unidad de Atención y Valoración a los Afectados por el Terrorismo (UAVAT), denuncia el "olvido y la desidia institucional" que sufren algunas de ellas.
Manrique, quien fue una de las víctimas del atentado que ETA hizo en Hipercor en 1987, ha lamentado que todavía hoy hay unas 250 personas que estaban en la Rambla el 17-A de 2017 y que siguen sin ser localizados, por lo que "se ignora si han hecho los trámites para recibir del Ministerio del Interior la indemnización que les corresponde". Según Manrique, desde entonces, el Estado se ha inhibido completamente de su función de localizarlas y garantizar que se les da los derechos que las amparan.
De hecho, Manrique ha vuelto a recordar que se debería impulsar una ley catalana de reconocimiento y reparación de víctimas del terrorismo, como ya tienen Euskadi, la Comunidad de Madrid, Aragón y La Rioja. Con este marco legal, apunta Manrique, se resolverían anomalías en el reconocimiento como víctima, como el hecho que la persona afectada por un atentado sólo dispone de un año para solicitarlo desde el día del suceso.
Escribe tu comentario