Los consejos para proteger a los más vulnerables de las altas temperaturas

La primera ola de calor del verano pondrá este jueves en aviso amarillo o naranja a casi toda España, con temperaturas que superarán los 40 grados en algunos puntos, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). 

De este modo, en Andalucía estarán en riesgo importante Córdoba, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla, y en riesgo la provincia de Cádiz; en Aragón, en riesgo importante Teruel y Zaragoza, y en riesgo Huesca; en Castilla y León estarán en riesgo Ávila, Burgos, Salamanca, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora; y en Castilla-La Mancha estará en riesgo importante Ciudad Real, Cuenca y Toledo, y en riesgo Guadalajara y Albacete.

Además, las altas temperaturas pondrán este jueves en aviso naranja a Madrid, Navarra y La Rioja y en aviso amarillo por el mismo motivo estará Baleares.

La AEMET señala que es probable la presencia de calima en la mitad sudeste peninsular, Ceuta, Melilla y Baleares, más intensa y probable cuanto más al sur. Tampoco descarta en las Canarias orientales. 

En cuanto a las temperaturas, se superarán los 36 grados en la mayor parte de interiores de la mitad sur y del nordeste peninsular, así como zonas de la meseta Norte e interiores de Baleares, incluso es probable que se alcancen los 38-40 grados en Andalucía, meseta Sur y en el medio Ebro. 

Las mínimas alcanzarán los 20-22 grados en la meseta Sur, Andalucía, medio-bajo Ebro y Mediterráneo, incluso los 24-26 en el área mediterránea oriental.

Proteger(se) ante los golpes de calor

Sea como sea, es importante saber cómo se debe actuar en jornadas así. Los expertos aconsejan reducir la exposición al sol durante periodos de altas temperaturas, permaneciendo el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados. 

Además, se recomienda consumir comidas ligeras y regulares, ricas en agua y sales minerales, como frutas y verduras. Es importante beber agua o líquidos con frecuencia, evitando aquellos que contengan cafeína, alcohol o mucho azúcar, ya que pueden causar deshidratación.

Es crucial prestar especial atención a lactantes, bebés, niños, mujeres embarazadas, personas mayores y aquellos con enfermedades (como hipertensión y problemas de corazón, entre otras) que puedan agravarse con el calor. Esto es especialmente importante para los dos últimos grupos si viven solos o en zonas aisladas.