¡Llega el otoño! Cinco platos catalanes para soportar mejor el frío

Con la llegada del otoño, las temperaturas comienzan a bajar, las hojas caen y el cuerpo nos pide platos cálidos y reconfortantes. La cocina catalana, rica en tradiciones y sabores, nos ofrece una variedad de recetas perfectas para combatir el frío. Aquí te presentamos cinco platos catalanes ideales para esta temporada.

1. Escudella i carn d’olla

La Escudella amb carn d’olla es uno de los platos más antiguos y tradicionales de Cataluña. Este contundente guiso es perfecto para los días más fríos del año. Se trata de un cocido que combina diferentes tipos de carne (pollo, cerdo, ternera), embutidos como la "butifarra" y vegetales (zanahorias, patatas, apio y col). El caldo se cocina lentamente, impregnándose de todos los sabores de los ingredientes, y se suele servir primero con galets (un tipo de pasta) y luego las carnes y verduras aparte. Es un plato que alimenta el cuerpo y el alma.

2. Canelons

Los Canelons son un plato típico de la cocina catalana, especialmente popular durante las festividades navideñas, aunque se disfrutan en cualquier momento del otoño e invierno. Esta receta llegó a Cataluña de la mano de los cocineros italianos a finales del siglo XIX y rápidamente se adaptó a la gastronomía local. Los canelones se rellenan tradicionalmente con una mezcla de carnes (ternera, cerdo, y a veces pollo), bechamel y se cubren con salsa bechamel y queso antes de gratinarse en el horno. La cremosidad de la bechamel y el gratinado dorado lo convierten en un plato irresistible.

3. Fricandó

El Fricandó es un guiso de ternera típico de la cocina catalana, caracterizado por su sabor profundo y reconfortante. Las finas rodajas de ternera se doran en una cazuela y luego se cuecen a fuego lento en una salsa de setas (normalmente "moixernons", una variedad de seta pequeña y sabrosa) con vino blanco y caldo. Este plato es ideal para los días de otoño cuando las setas están en temporada, y su combinación de sabores lo hace perfecto para acompañar con un buen pan de payés.

4. Suquet de Peix

Aunque es un plato que originalmente proviene de las costas catalanas, el Suquet de Peix es un guiso que también se disfruta en las zonas más frías durante el otoño. Este guiso de pescado es una muestra de la simplicidad y riqueza de la cocina mediterránea. Se elabora con pescado fresco, mariscos, patatas y una salsa hecha a base de tomate, ajo, cebolla y vino blanco. El resultado es un plato con un sabor intenso a mar que calienta el cuerpo y el espíritu.

5. Panellets

Aunque los Panellets no son un plato principal, sino un dulce, son imprescindibles en cualquier mesa catalana durante el otoño, especialmente en la festividad de la Castañada. Estos pequeños dulces se preparan a base de almendra molida, azúcar, huevo y ralladura de limón, y se recubren con piñones, coco, chocolate o membrillo. Los panellets son pequeños bocados de dulzura que acompañan perfectamente una tarde fría junto a un café o un licor.