¿Cuántas cervezas se necesitan para dar positivo en un control de alcoholemia con la nueva ley?

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha aclarado una de las preguntas más frecuentes entre los conductores españoles: ¿cuántas cervezas se pueden consumir sin dar positivo en un control de alcoholemia?. Esta cuestión ha cobrado aún más relevancia tras el reciente anuncio sobre la posible reducción del límite de alcohol permitido en sangre, que actualmente es de 0,5 gramos por litro para conductores habituales y 0,3 para conductores noveles.

Factores que influyen en la tasa de alcohol en sangre

La cantidad de alcohol en sangre no solo depende de la cantidad de bebida consumida, sino también de varios factores como:

• El tipo de bebida alcohólica y su graduación.
• El peso y el sexo de la persona.
• La rapidez con la que se consume el alcohol.

El alcohol ingerido pasa al sistema nervioso central a través del aparato digestivo, lo que afecta las capacidades para conducir con seguridad. Incluso con niveles de alcohol en sangre inferiores a los permitidos, la capacidad de reacción y coordinación se ve afectada, lo que incrementa el riesgo de accidentes.

Cálculo de la cantidad de alcohol en sangre

Para calcular el alcohol consumido, es necesario saber la cantidad exacta de alcohol puro ingerido. El procedimiento es el siguiente:

1. Multiplicar la graduación de la bebida (indicada en grados en la etiqueta) por la cantidad consumida en mililitros.
2. Dividir el resultado entre 100 y multiplicar por 0,8 (la densidad del alcohol).

Por ejemplo, una cerveza de 200 ml con una graduación alcohólica del 5% contiene alrededor de 8 gramos de alcohol puro.

Efectos del alcohol en la conducción

El alcohol afecta la conducción desde el primer momento. Con una tasa de alcoholemia entre 0,3 y 0,5 gramos por litro, que se puede alcanzar con aproximadamente dos cervezas, los efectos comienzan a notarse: aumento en el tiempo de reacción y problemas de coordinación. Al sobrepasar los 0,5 gramos por litro, los problemas de visión son evidentes y, cuando se superan los 0,8 gramos por litro, los problemas de atención y coordinación se vuelven graves, además de aparecer somnolencia intensa.

Posible reducción del límite de alcoholemia

La DGT está estudiando la reducción del límite de alcoholemia permitido a 0,2 gramos por litro para todos los conductores, una medida que ha generado preocupación. El objetivo es disminuir los accidentes de tráfico relacionados con el consumo de alcohol, que son una de las principales causas de siniestralidad en España.

Consecuencias legales por superar el límite de alcoholemia

Superar el límite de alcoholemia establecido tiene graves consecuencias legales. A partir de 1,2 gramos por litro en sangre (0,6 en aire espirado), la conducción se considera un delito que puede llevar aparejadas penas de entre tres y seis meses de prisión. Es importante destacar que el alcohol se metaboliza lentamente, y su eliminación del organismo puede verse influenciada por factores como el peso, la presencia de enfermedades o el consumo de medicamentos.

Recomendaciones de la DGT: cero alcohol al volante

La DGT recomienda a los conductores que eviten consumir alcohol si van a ponerse al volante. Incluso una pequeña cantidad de alcohol puede alterar la capacidad de reacción y la coordinación, aumentando de manera considerable el riesgo de sufrir un accidente de tráfico. La opción más segura siempre es optar por alternativas como el transporte público o contar con un conductor designado.

En resumen, el consumo de alcohol y la conducción son una combinación peligrosa. Aunque el límite de alcoholemia puede variar, la mejor opción siempre es evitar el alcohol si se tiene que conducir. Las leyes son estrictas, y las consecuencias, tanto a nivel personal como legal, pueden ser muy graves.