10 ataques con arma blanca al día en Catalunya: Parlon dice que ya hay "cultura de llevar una navaja"

La consellera de Interior y Seguridad Pública de la Generalitat, Núria Parlon, ha asegurado que Catalunya está ante una preocupante proliferación de incidentes relacionados con armas blancas en Catalunya. 

En una entrevista concedida a RAC1 ha asegurado que, entre enero y agosto de este año se registraron 2.500 incidentes, lo que equivale a un promedio de 10 por día. En comparación, durante todo 2023 se contabilizaron 3.000 (poco más de 8 al día), lo que indica un incremento en la frecuencia de estos sucesos.

Parlon destacó que, por parte de los Mossos y de la Generalitat, se ha observado un cambio cultural en cuanto al porte de armas blancas. Cada vez es más común que las personas lleven consigo navajas sin una justificación clara. 

Explicó que mientras algunos lo hacen por costumbre, otros, especialmente aquellos vinculados al crimen organizado, lo hacen como medida de autodefensa en situaciones peligrosas. Sin embargo, según la consellera, parte del aumento en los datos podría deberse también a una mayor actividad policial, que ha sacado a la luz más casos de los que se detectaban en el pasado.

Pide no generar odio

Otro punto importante que abordó Parlon fue la necesidad de separar el debate sobre la delincuencia del discurso de odio hacia los inmigrantes. Subrayó que la inmigración en Catalunya ha contribuido en gran medida a enriquecer la sociedad y la economía. En este sentido, instó a la ciudadanía y a las autoridades a evitar discursos que asocien a los inmigrantes con la inseguridad, señalando que el Govern no comparte esas percepciones estigmatizantes.

Al mismo tiempo, Parlon reconoció que un porcentaje significativo de los delitos en Catalunya son cometidos por personas que no poseen un DNI nacional. No obstante, insistió en que no se debe caer en generalizaciones ni alimentar discursos de odio, ya que esto no solo es injusto, sino contraproducente para la cohesión social.

Multirreincidencia

La consellera también se refirió a la multirreincidencia, manifestando que es injusto suponer que las personas en situaciones vulnerables están más predispuestas a cometer delitos. Esto refuerza su postura de que la marginalización de ciertos grupos solo profundiza los problemas sociales.

El tema de las armas blancas, por tanto, no solo refleja una cuestión de seguridad, sino también de cómo las autoridades y la sociedad gestionan las dinámicas sociales y económicas que pueden incidir en la delincuencia. 

A su modo de ver, pues, se debe abordar el problema con medidas preventivas y sin recurrir a la estigmatización.