Un escritor explica que "Colón tuvo dificultades para reunir tripulación, recurriendo incluso a condenados a muerte"

En una reciente conferencia en el marco del Science Fest Muy de Madrid, publicada recientemente por la revista Muy Interesante, el historiador Juan Eslava Galán ofreció una serie de reflexiones y detalles sorprendentes sobre el contexto histórico que rodeó los primeros viajes hacia América y el declive del feudalismo en Europa. A través de sus explicaciones, Eslava Galán no solo profundizó en los desafíos a los que se enfrentó Colón, sino que también trazó un retrato del complejo escenario político, social y económico de la época. Desde las guerras sucesorias en Castilla hasta la necesidad de encontrar nuevas rutas comerciales bloqueadas por el Imperio Otomano, sus declaraciones arrojan luz sobre los factores que impulsaron uno de los eventos más trascendentales de la historia.  

"En su primer viaje, Colón tuvo dificultades para reunir tripulación, recurriendo incluso a condenados a muerte para completar la expedición", explica Eslava Galán. Este hecho, poco conocido, pone de manifiesto las dudas que existían en su tiempo respecto a la viabilidad de su propuesta y la resistencia de muchos marineros a embarcarse en una travesía considerada, por entonces, una locura.

"Vamos a hablar sobre *Juego de Tronos*. Aunque parezca curioso, esto tiene que ver con el siglo XV", señala el autor. "En esa época, el feudalismo estaba en declive y comenzaban a surgir en Europa reyes importantes que buscaban engrandecer sus reinos". En este contexto, "los grandes protagonistas de la península ibérica eran Castilla, que ocupaba la mayor parte del centro, Portugal y Aragón".

"La muerte del rey Enrique IV, conocido como 'el Impotente', desató una disputa sucesoria. Enrique quiso casar a su hija, Juana 'la Beltraneja', con el heredero del trono de Portugal para unir ambos reinos". Sin embargo, Juana fue siempre una figura polémica, pues "se rumoraba que no era hija del rey, sino de don Beltrán de la Cueva, su valido y hombre de confianza". Por otro lado, "Isabel, que en realidad era una reina intrusa, logró imponerse y consolidar su causa, aunque la legítima heredera era Juana". Esto provocó "una guerra entre los partidarios de Isabel y los de Juana, que no solo se libró en Castilla, sino también en las costas africanas".

En ese periodo, "las especias eran un bien tan valioso como el oro". Según Eslava Galán, "eran imprescindibles para conservar la carne, mejorar el sabor del vino y se usaban incluso con fines medicinales". Sin embargo, "los turcos habían bloqueado la ruta terrestre hacia Oriente, lo que obligó a los europeos a buscar nuevas alternativas". Portugal lideró estos esfuerzos: "Los portugueses inventaron la carabela, un barco ligero y maniobrable que les permitió avanzar en la exploración marítima. Un obstáculo importante fue el cabo Bojador, un lugar temido por los marinos debido a sus peligrosos bajos fondos y vientos impredecibles". El historiador destaca que "Gil Eanes, un marino portugués, decidió alejarse de la costa para superar el cabo. Lo logró y con ello cambió el curso de la exploración marítima".

Mientras Portugal avanzaba hacia el sur, "Castilla centraba sus esfuerzos en la conquista de las Islas Canarias. El Tratado de Alcáçovas dejó claro que Portugal tenía exclusividad en las rutas al sur del cabo Bojador, mientras que Castilla se quedaba con las islas del Atlántico norte".

En este escenario surgió Cristóbal Colón, un marino genovés que, como recuerda Eslava Galán, "propuso llegar a Oriente cruzando el Atlántico en lugar de rodear África". Los portugueses rechazaron su propuesta porque "los cosmógrafos consideraron imposible cubrir esa distancia con los barcos de la época". No obstante, "Colón no se rindió y llevó su plan a Castilla, donde fue rechazado inicialmente hasta que logró el apoyo de la reina Isabel". Finalmente, "las Capitulaciones de Santa Fe le garantizaron grandes beneficios si conseguía alcanzar su objetivo".

"Cuando llegó a América, Colón creyó estar en Asia, pero no encontró las riquezas que esperaba", afirma Eslava Galán. "Lo que halló fue una población indígena humilde. Intentó justificar su viaje enviando esclavos taínos a Castilla, pero la reina Isabel lo prohibió, argumentando que eran súbditos de la Corona". Esto supuso "un giro en la empresa de Colón, que impulsó además la firma del Tratado de Tordesillas". Como detalla Eslava Galán, "ese tratado dividió el mundo entre España y Portugal: a Portugal se le otorgaron los territorios al este, como Brasil, y a Castilla los del oeste".

"Los castellanos, obsesionados con encontrar un paso que conectara el Atlántico con el Pacífico para llegar a las especias, no descansarían hasta que Magallanes y Elcano descubrieron el estrecho de Magallanes durante el reinado de Carlos V". Sobre el conocimiento que permitió a Colón planificar su viaje, el historiador destaca que "aún existen incógnitas". Según él, "se especula que pudo haber escuchado de un *prenauta* que llegó a América antes que él o que aprendió sobre las corrientes marítimas durante su estancia en Porto Santo".  

Finalmente, Eslava Galán subraya que "Colón cometió errores de cálculo sobre la distancia entre Europa y Asia, pero su tenacidad cambió la historia". Además, añade que "aunque Colón era genovés, trató de ocultar sus orígenes humildes para escalar en la sociedad castellana". Su figura, según Eslava Galán, "fue exaltada más tarde por los emigrantes italianos en Estados Unidos, aunque en tiempos recientes ha sido revisada y su legado se debate entre la admiración y la crítica".