Día 2 del juicio a Rubiales por el beso: Luis de la Fuente declara y se lleva una bronca del juez

Luis de la Fuente, actual seleccionador nacional, declaró en la Audiencia Nacional en el marco del juicio a Luis Rubiales. Desde un principio, negó haber tratado el tema del beso con el expresidente de la RFEF. Según su versión, acudió a la reunión en la Federación con el único propósito de hablar sobre la lista de convocados. Asegura que le informaron de que "se estaba liando gorda" con el tema del beso, pero insiste en que no participó en ninguna conversación al respecto.

Durante su declaración, De la Fuente reiteró que no escuchó las preguntas ni respuestas que se hicieron en la reunión de Integridad y que en el vuelo de regreso a España tampoco comentó nada al respecto. Sin embargo, esta postura choca con los testimonios de otros testigos que sí lo sitúan participando activamente en la reunión.

El juez lo reprende y la fiscal pone en duda su testimonio

De la Fuente llegó a la Audiencia Nacional sobre las 9:30 de la mañana sin responder preguntas de la prensa. Ante el juez José Manuel Clemente Fernández-Prieto González, confirmó su presencia en la reunión de Integridad pero mantuvo su postura de que no participó en la discusión.

Sin embargo, su actitud en la declaración generó tensión con el magistrado, quien lo reprendió por intentar seleccionar sobre qué declarar: "Usted viene a hablar de lo que se le pregunte". Además, la fiscal planteó la posibilidad de un "falso testimonio", ya que su versión contradice la de otros testigos, lo que podría acarrearle consecuencias legales.

Su lenguaje corporal cambió durante la declaración. Llegó con una actitud aparentemente relajada, pero en el juicio se mostró más serio. En un momento, cruzó miradas con los acusados y, al finalizar su testimonio, intercambió un leve movimiento de cabeza con Rubiales, quien le respondió con una pequeña sonrisa.

Luis Rubiales afronta un proceso judicial en el que la Fiscalía solicita 2 años y medio de cárcel por los delitos de agresión sexual y coacciones. Comparte banquillo con Albert Luque, Jorge Vilda y Rubén Rivera, todos implicados en la presión a Jennifer Hermoso tras el beso en la final del Mundial.

Durante el juicio, se recordó que en el vuelo de regreso desde Australia, Rubiales le dijo a Hermoso: "A ti y a mí nos gusta lo mismo", una frase que ha sido interpretada en el contexto de una presión indebida. Además, se investiga su rol en la manipulación de un comunicado en el que se atribuyeron palabras a la futbolista sin su autorización.

Jennifer Hermoso declaró que nunca consintió el beso de Rubiales y que él le agarró la cabeza con fuerza. Además, aseguró que en el vuelo de vuelta sufrió presiones por parte de la Federación para cambiar su versión de los hechos. Según su testimonio, intentaron influir en ella para que firmara un comunicado que no reflejaba la realidad.

Otros testigos clave y sus declaraciones

Uno de los testigos más relevantes fue Pablo García Cuervo, exdirector de Comunicación de la RFEF, quien admitió haber escrito el comunicado con las supuestas palabras de Hermoso. Según él, Rubiales le sugirió hacerlo y lo revisó antes de su publicación. No obstante, las versiones sobre si Hermoso consintió o no este comunicado son contradictorias.

Otro testimonio clave fue el de Enrique Yunta, actual responsable de Comunicación de la RFEF, quien aseguró que De la Fuente sí estuvo en la reunión de Integridad, lo que contradice al seleccionador.

Por su parte, Miguel García Caba, exdirector de Integridad, afirmó que tuvo 36-48 horas para redactar el informe sobre el beso y que Hermoso decidió no participar, algo que podría haber cambiado el resultado del documento.