Alerta en el Pallars Jussà: Un hongo amenaza con destruir 100 hectáreas de bosque
¿Cómo están salvando el bosque de Salàs de Pallars y qué harán con los árboles talados?
El bosque público de Salàs de Pallars, en el Pallars Jussà, es un espacio natural de 425 hectáreas muy apreciado por vecinos, deportistas y aficionados a la recolección de setas. Sin embargo, en los últimos meses, una plaga de hongos ha puesto en peligro este emblemático enclave. Alrededor de 100 hectáreas están afectadas por el hongo Diplodia sapinea, que ataca a los pinos, provocando la muerte de muchos de ellos. ¿Qué se está haciendo para combatir esta amenaza y salvar el bosque?
La plaga que está matando los pinos
El hongo Diplodia sapinea es un patógeno que permanece latente hasta que los árboles sufren estrés, como el causado por sequías extremas o granizadas. En este caso, la falta de agua ha sido el detonante, debilitando los pinos y permitiendo que el hongo se propague. De las 100 hectáreas afectadas, 45 están gravemente dañadas, con árboles muertos o en estado crítico que deben ser talados para evitar que la plaga se extienda.
Enric Vadell, secretario de los Servicios Territoriales de Agricultura en el Pirineu, explica que la actuación es "quirúrgica": se evalúa cada árbol y se actúa en consecuencia. A diferencia de las granizadas, que afectan al 100% de los árboles, la sequía permite una intervención más selectiva.
Una amenaza ligada al cambio climático
El cambio climático está agravando este tipo de plagas. El aumento de las temperaturas favorece la proliferación del hongo en zonas que antes estaban protegidas por el frío. No es la primera vez que se detecta esta plaga en Catalunya: el año pasado ya se encontraron bosques afectados en Coll de Nargó, Castellbò y Fonollosa, entre otros. Anteriormente, también se registraron casos en la Catalunya Central, el Empordà, las Terres de l'Ebre y la comarca de la Selva.
Prevención de incendios y aprovechamiento de la madera
La tala de los árboles afectados no solo busca salvar el bosque, sino también prevenir incendios. Lluís Cervera, ingeniero forestal del Departamento de Agricultura, advierte que la acumulación de troncos secos y muertos podría convertirse en un grave problema durante el verano, especialmente en una zona tan boscosa como esta.
Se estima que la tala sanitaria generará unas 1.200 toneladas de madera. Pero, ¿qué harán con toda esa madera? Según Jaume Solé, alcalde de Salàs de Pallars, la mayoría se destinará a alimentar calderas de biomasa en equipamientos públicos como el Hospital de Tremp y varias escuelas. "Es un ejemplo de gestión sostenible que, si se impulsa, podría aplicarse en todo el Pirineu", afirma Solé.
Un mes y medio de actuaciones
Las labores de saneamiento del bosque continuarán durante un mes y medio más. Este esfuerzo no solo busca salvar el bosque de Salàs de Pallars, sino también sentar un precedente para la gestión de plagas y la prevención de incendios en otras zonas afectadas por el cambio climático.
Escribe tu comentario